El Valencia Basket abrirá este martes la final de la Eurocopa ante el Alba Berlin que dirige el laureado Aíto García Reneses con la idea de que la fuerza de jugar en su pista en una Fonteta que estará repleta le dé el impulso para superar al equipo alemán y circunstancias adversas como la baja de Guillem Vives, su base más en forma.
La final es al mejor de tres encuentros y tendrá un segundo duelo este próximo viernes en Alemania. Si hace falta un tercero para decidir el campeón y el equipo que se lleva con el título una plaza para la próxima Euroliga, se jugaría el lunes 15 de nuevo en el pabellón de la Fuente de San Luis.
En el caso de no conseguir el que sería su cuarto título de la segunda máxima competición del baloncesto europeo, antes llamada Copa ULEB, el Valencia aún podría acceder a la Euroliga si fuera el mejor equipo en la ACB sin contar con el Real Madrid, el Barça Lassa y el Kirolbet Baskonia.
El equipo valenciano afronta este encuentro tras hace logrado una agónica victoria en la cancha del MoraBanc Andorra el pasado viernes, en un encuentro en el que le volvió a costar dar su máximo aunque se da por hecho que para esta cita la sobrará motivación e intensidad dado lo que está en juego.
El conjunto alemán, fiel al estilo de los últimos equipos de su histórico entrenador, despliega habitualmente un juego alegre y muy rápido, que pondrá a prueba tanto la transición defensiva del Valencia como su defensa individual y del 'dos contra dos'.
Las grandes referencias del Alba son el interior estadounidense Luke Sikma, exjugador del club valenciano y ganador con el equipo de la ACB de 2017, y su compatriota y base Peyton Siva, cuya defensa es una de las principales preocupaciones del Valencia y más con la ausencia de Vives.
Sin el base catalán, el técnico Jaume Ponsarnau deberá realizar un único descarte para el choque por decisión técnica y se da por hecho que será un jugador de la línea exterior. El base Sergi García es el que más veces se ha quedado sin vestir cuando han estado todos.
En cualquier caso, se da por hecho que sin Vives, se multiplicarán los minutos de Sam Van Rossom, el otro base de confianza de Ponsarnau esta campaña dados los problemas físicos de Antoine Diot.