El Valencia Basket venció con contundencia pero no sin dificultad en el primer partido de la final de la Eurocup ante el Alba Berlín. Puede sentenciar la cita el viernes que viene en la cancha germana. En el peor de los casos, los valencianos se han asegurado que la serie, pase lo que pase, volverá a Valencia en caso de empate.
Un tercer cuarto inmejorable, en el que los de Jaume Ponsarnau llegaron a tener 18 puntos de ventaja, cimentó el triunfo de un Valencia Basket que fue muy superior a lo largo de todo el encuentro.
Sólo el 0-9 inicial en el último cuarto inquietó algo al público de la Fonteta que, salvo ese momento de estupor, que llegó a reducir la ventaja a diez puntos, disfrutó con su equipo y con una victoria merecidísima. La decimoquinta victoria consecutiva en Europa llegó en un partido jugado de poder a poder a muchos puntos.
Will Thomas, con 22 puntos, fue el máximo anotador del equipo, el mejor jugador del primer duelo de la final y el principal sostén del Valencia Basket a lo largo del choque. Su aportación y la dirección de Sam Van Rossom en los momentos más complejos del partido fueron suficientes para doblegar a un rival que, a partir del tercer cuarto, en ningún momento dio la sensación de poder doblegar a los valencianos. Si bien es cierto, al descanso la diferencia era apenas de tres puntos, pero a partir de ahí se acabaron los germanos.
Este viernes (20 horas) en el Mercedes Benz Arena de Berlín Valencia Basket tendrá la primera oportunidad de alzar su cuarto título europeo.
89.- Valencia Basket (20+21+30+18): Van Rossom (15), Sastre (2), San Emeterio (11), Will Thomas (22), Tobey (3) -cinco titular- Abalde (2), Labeyrie (7), Diot (-), Dubljevic (9), Matt Thomas (16) y Doornakamp (2).
75.- Alba Berlin (13+25+15+22): Siva (17), Hermannsson (16), Giedraitis (9), Sikma (7), Clifford (4) -cinco titular- Saibou (-), Giffey (7), Schneider (-), Wagner (2), Ogbe (1), Thiemann (8) y Nnoko (4).
Árbitros: Radovic (CRO), Mogulkoc (TUR) y Vyklicky (CZE). Sin eliminados.
Incidencias: primer partido de la final de la Eurocopa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8.500 espectadores.