El entrenador del Chocolates Trapa Palencia, Carles Marco, ha asegurado que está "más que satisfecho" del trabajo de sus jugadores que han sabido manejar la presión de un partido complicado contra el Retabet Bilbao, al que han ganado por 61-57, forzando el quinto en Miribilla el próximo miércoles.
"La presión era ganar hoy, forzar el quinto y hacer buen papel con nuestra afición", ha sostenido en rueda de prensa en la que ha felicitado al equipo y a la afición en un partido que ha sido "duro, intenso y complicado porque el Retabet es un equipazo".
Ha reconocido que sus jugadores empezaron el encuentro "un poco dubitativos y con poca energía" pero que Urko Otegui les ha ido poniendo en partido con su entusiasmo y han hecho un "muy buen" segundo cuarto, mientras que el tercero y el cuarto han sido "un drama para los dos equipos".
Marco ha señalado que el Retabet tiene una muy buena filosofía defensiva y que el Palencia también ha intentado defender mejor, pero en algunos momentos la calidad del partido ha sido "peor" porque "muchas veces es un problema de que la sangre no llega a la cabeza para pensar y las piernas no tiran como quieres y tienes menos energía".
"Pero lo hemos solventado con la tensión hasta el último momento", ha afirmado. Y con un juego más incisivo porque "hemos hecho más nuestro juego", ha añadido.
Ha reconocido que ganar dos partidos seguidos al Bilbao es muy difícil y que un quinto es un partido complicado por la tensión, la ansiedad y los nervios.
Pero también ha dicho que el Chocolates Trapa lo va a intentar porque se ha ganado "esa oportunidad" y va a ir a Bilbao a competir porque considera que no es una cuestión de cansancio, que afecta a los dos equipos, sino de "gestionarlo mejor, que funcione la cabeza y el estado de ánimo".
"La ilusión que nos hace a todos volver otra vez a Miribilla y jugar un quinto partido no tiene precio ni cansancio posible", ha concluido.