El técnico del Unicaja, Ibon Navarro, ha afirmado este viernes que el encuentro de mañana ante el Bitci Baskonia "va a ser muy complicado a nivel físico", por lo que intentarán utilizar "otras armas diferentes como jugar más a campo abierto, menos cinco contra cinco y controlar a jugadores muy peligrosos".
Navarro dijo en rueda de prensa que la táctica será "intentar un partido a campo abierto y ritmo muy alto" y, sobre el objetivo de su equipo de acabar en décima posición tras una temporada muy irregular, comentó que le "quedan dos partidos en casa ante equipos que luchan por jugar el play off y serán muy exigentes".
"Son oportunidades para competir ante equipos de nivel superior por lo que han demostrado durante la temporada y en estos momentos hay que centrarse en eso e intentar olvidarse de lo que se ha hecho, de estar por debajo, de que esto es un desastre", reconoció.
Sobre la próxima temporada, el entrenador cajista resaltó que y lo único que importa es ésta y que "este club lo tiene todo para, si se hacen bien las cosas, estar donde estuvo".
Ibon Navarro se inició en el Baskonia como entrenador e incluso dirigió al equipo vitoriano, por lo que el choque será especial para él, aunque más en Vitoria "cuando ves gente, familia y amigos y estás en el hotel recibiendo".
También recordó que fue ayudante del técnico del conjunto vitoriano, el croata Neven Spahija: "Me une una amistad, fui su ayudante y me enseñó mucho", destacó.