Semana negra en la Euroliga para los equipos españoles. Ninguno de los cuatro (Real Madrid de Basket, Barcelona, Valencia Basket y Baskonia) consiguieron ganar sus partidos en la jornada 27. Pese a ellos, madrileños y catalanes siguen liderando la clasificación.
El primero en caer fue el Valencia Basket el jueves. El equipo ché cayó en su visita a la pista de la Virtus Segafredo Bologna por 87-74 en un partido en el que el equipo taronja no encontró acierto en la pintura. El entrenador Álex Mumbrú comenzó el partido con el quinteto formado por Kevin Pangos, Chris Jones, Justin Anderson, Damien Inglis y Brandon Davies, pero sus rivales fueron mejores gracias a las anotaciones de Harper y Jovic.
También cayó derrotado el pasado jueves el Real Madrid. El Panathinaikos asaltó el Wizink Center que supone la primera derrota en casa en la competición continental del equipo blanco tras ganar sus 13 primeros encuentros. La derrota por 86-97 provocaron que los blancos no pudieran clasificarse matemáticamente para los playoffs.
Sloukas con 16 puntos y seis asistencias, Nunn y sus 17 puntos, Grigonis y Mitoglou siendo decisivos en los minutos finales y con Juancho Hernángomez teniendo buenos, los griegos demostraron ser uno de los equipos más temibles de la competición.
El Barcelona fue otro de los que sufrió en su casa. El estreno de Ricky Rubio con el equipo catalán quedó en un segundo plano por el Mónaco (67-77). El base disputó 11 minutos y acabó con cinco puntos (2/4 en tiros de dos y 0/1 en triples), dos rebotes, una asistencia y cuatro de valoración.
No pudo ser. Pese al gran partido del Baskonia, el Fenerbahce masacró a triples al equipo español (111-96). Diecinueve lanzamientos anotados y unos Nigel Hayes-Davis y Vanja Marinkovic espectaculares en ataque dieron la victoria a los turcos, que están séptimos en la clasificación.