No ha sido la mejor jornada 27 para los equipos españoles. Los cuatro han perdido sus partidos de Euroliga, dejando un pleno de derrotas. Pero si hay algo que destacar es la vuelta de Ricky Rubio con el Barcelona, a dónde ha regresado tras dejar la NBA.
El Barcelona recibía al Mónaco en un partido marcado en rojo en el calendario. La debilidad en el rebote de los catalanes, así como los fallos desde el exterior, hicieron que los monegascos se llevaran el partido por 67-77.
Eso sí, la afición del Palau pudo ver la canasta de la jornada gracias a Jan Vesely. El número 6 del Barcelona recibió el balón fuera del círculo y con gran agresividad saltó por encima de todos sus rivales para machacar el aro. Una canasta espectacular que levantó a todos los aficionados.
El base español Ricky Rubio volvió con el Barcelona 4.644 días después. Con algo más de 11 minutos, el español acabó con cinco puntos (2/4 en tiros de dos y 0/1 en triples), dos rebotes, una asistencia y cuatro de valoración. Una escasez de puntos debido en parte a la falta de ritmo competitivo.
Tras el partido, Ricky Rubio se mostró contento en lo personal aunque no tanto en lo colectivo. "Es especial jugar aquí. Es un pabellón pequeño y muy acogedor, y seguro que en los momentos grandes dará miedo", afirmó el jugador catalán. "Me he sentido muy apoyado y espero dar muchas alegrías", aseguró.
"Hoy era un partido difícil por emociones y sensaciones. He intentado controlarlo para que no afectara al equipo, por desgracia hemos perdido y esto no se puede celebrar, pero estoy contento de volver a jugar", comentó. "Anteayer me dijo que lo más seguro era que no, ayer que estuviera preparado y hoy ha sido el día de los descartes. Seré un jugador más aquí a disposición del equipo, que no merme al equipo sino que venga a ayudar".