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113-99. Olynyk se impuso en el juego interior y decidió triunfo de Celtics

El pívot canadiense Kelly Olynyk aportó 19 puntos y encabezó el ataque de los Celtics de Boston que se impusieron con comodidad por 113-99 a los Timberwolves de Minnesota y se colocaron a un juego y medio del liderato de la División Atlántico.Olynyk, que ha recuperado la titularidad, se ha convertido en la primera opción ofensiva de los Celtics, mientras que el alero Jae Crowder respondió con un doble-doble de 18 puntos, 10 rebotes --todos defensivos-- y puso dos tapones que lo dejaron como el líder del juego interior del equipo de Boston (15-13), que rompieron una racha de tres derrotas consecutivas.
La gran atracción que pudo haber sido al ver de nuevo en acción al veterano ala-pívot Kevin Garnett, de 39 años, ahora con los Timberwolves, no se dio porque el entrenador del equipo de Minnesota, Sam Mitchell, decidió darle descanso.
"Queremos a KG", coreó el público una docena de veces durante el encuentro. Garnett, firmó un contrato de dos años con los Timberwolves el pasado verano, pero éste pudo haber sido su último partido en Boston.
El pívot reserva Tyler Zeller surgió como sexto jugador de los Celtics y su aportación de 14 tantos y ocho rebotes, antes que lo eliminaran por acumulación de personales, también ayudó a la victoria.
Mientras que el ala-pívot David Lee, que salió de titular, confirmó que va a más con su juego al lograr 13 puntos y ocho rebotes.
El alero canadiense Andrew Wiggins lideró a los Wolves con 26 puntos, mientras que el ala-pívot novato, el dominicano, Karl-Anthony Towns aportó un doble-doble de 25 y 16 rebotes.
Towns, que jugó 35 minutos, anotó 8 de 14 tiros de campo, falló un intento de triple, y estuvo perfecto con un 9-9 desde la línea de personal.
El novato seleccionado con el número uno en el pasado sorteo universitario capturó 13 rebotes defensivos, repartió dos asistencias, recuperó un balón, perdió dos y puso tres tapones.
Mientras que el base español Ricky Rubio volvió a fallar en el apartado encestador al conseguir sólo cuatro puntos en los 33 minutos que estuvo en la pista del TD Garden, de Boston.
Rubio anotó sólo uno de nueve tiros de campo, falló los dos intentos de triple que hizo y acertó sólo 2 de 4 desde la línea de personal.
El internacional español repartió ocho asistencias, que lo dejaron líder del equipo en esa faceta del juego, robó cuatro balones y perdió dos, además de cometer dos faltas personales.

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