El ala-pívot argentino Luis Scola, que se enfrentó hoy a su exequipo en la NBA, Houston Rockets, como titular del conjunto chino Sharks Shanghai, se mostró "contento" con su nueva andadura profesional en Asia.
Scola regresó al Toyota Center para el partido amistoso que los Rockets ganaron con facilidad (128-86) a los Sharks, un resultado que no tuvo ningún valor deportivo para los equipos, pero sí de un gran recuerdo para el jugador suramericano.
El de Floresta (Buenos Aires) fue el centro de atención en su vuelta a Houston, tras sorprender con su marcha al baloncesto chino cuando aún tenía opciones de continuar en la NBA.
"Decidí que había llegado el momento de hacer un cambio, siempre me atrajo la opción de jugar en China y me siento muy contento allí", declaró a Efe Scola, quien jugó cinco temporadas con los Rockets (2007-2012), después de nueve en el baloncesto español.
Scola, que disputó 40 minutos, fue junto con el base Jimmer Fredette, otro exjugador de la NBA, el mejor de los Sharks, con un doble-doble de 18 puntos, 12 rebotes y tres asistencias.
Precisamente la posibilidad de disfrutar de muchos minutos de juego le llevó a marcharse a China, pues en Estados Unidos, a sus 38 años, iba a tenerlos muy limitados.
"Tenía ganas de buscar un lugar donde jugase más, una experiencia nueva, siempre me intrigó mucho China, tuve la oportunidad y me gustó", valoró Scola. "Me ha dado la oportunidad de mantenerme activo, de competir en una liga que es muy difícil, conocer otra parte del mundo, otra cultura y un montón de cosas".
Scola y el recientemente retirado Manu Ginóbili han sido los dos jugadores argentinos más destacados en la NBA.
El de Floresta (Buenos Aires) reconoció que Ginóbili, Andrés Nocioni, Fabricio Oberto, Carlos Delfino y Pablo Prigioni fueron una generación especial de jugadores en la historia del baloncesto de su país, pero se mostró convencido de que hay nuevo talento que podrá lograr grandes cosas.
"Creo que tenemos un grupo de jugadores muy buenos. Ahora mismo la selección argentina esta gozando de muy buena salud", destacó Scola, quien recordó el valor de lo logrado por la "Generación Dorada" tanto en Juegos Olímpicos como en Mundiales.
En cuanto a su futuro, Scola fue categórico al reconocer que no tenía en su mente planes de volver a la NBA o ir al baloncesto europeo.
"Ni una cosa ni la otra", sentenció Scola. "No tengo ninguna expectativa de nada. Solamente juego, me divierto, lo paso bien, me esfuerzo, trabajo y cuando concluya el año, veremos a ver qué opciones tengo sobre la mesa y están acorde con lo que quiera hacer, entonces decidiremos".