El picorcito previo al draft de la NBA 2024 es especial cuando aparece un español como Juan Núñez como único disponible para la mejor liga del mundo. A pesar de estar lejos de las mejores previsiones, el talentoso base mira de reojo al Barça mientras espera franquicia. Y su futuro depende de la elección, del rol prometido y de las posibilidades a partir de esta madrugada o de la noche del jueves.
El draft de la NBA 2024 crea por primera vez en su historia una división en dos días que favorece al espectáculo. Y en esa fiesta mediática que marca el futuro de al menos 58 chavales, Juan Núñez aparece como el único referente español después del paso atrás de Izan Almansa, Aday Mara y Baba Miller.
La realidad de Juan Núñez es un espejo de la situación del baloncesto español en la NBA. Con habilidades de sobra para la élite, el dilema del draft es la apuesta por el potencial y ahí la mayoría de equipos en una segunda ronda buscan un unicornios imposibles para perseguir casos como el de Jokic.
La seguridad del jugador estable en Europa nunca ha sido una constante en la NBA, y de hecho el anterior MVP de la Euroliga, Vezenkov, apenas es relevante en Estados Unidos después de su primer año en los Sacramento Kings. Y esa historia guarda décadas de ejemplos que pasan ahora por Juan Núñez.
El base que apunta al Barça es especialmente inteligente, un gran pasador y tiene una altura envidiable para su posición. Pero su potencial físico o como tirador está por debajo de los de otros jugadores de dos años menos que tienen una proyección más alta. Y seguramente el 95% de todos ellos nunca llegue a tener la carrera de Núñez en FIBA o NBA, pero es la realidad del circuito alrededor del draft.
En la segunda ronda, la aspiración del español según los mock drafts de la NBA, casi nadie busca al decimotercer jugador de una rotación. Buscan a un jugador diferencial que se desarrolle durante tres años y encuentre su hueco en un futuro lejano. Al menos en el perfil de un jugador de rol. Y aún así, hay espejos como el de Santi Aldama a finales de la primera ronda que dan esperanzas en ciertos equipos para encontrar acomodo a Núñez.
En el cierre de la primera ronda puede haber algún equipo con el convencimiento de ver en Juan Núñez con más proyección de la esperada. Como sucedió en su día con Santi Aldama, elegido a las puertas de la segunda ronda, quizás alguien tenga ese brillo en sus ojos por el talento español.
De hecho el pick 26 de los Washington Wizards es el más óptimo en cuanto a elucubraciones por posibilidades en un equipo ahora en crecimiento. Aún así la realidad de Juan Núñez según las previsiones son otras, y eso supone pensar en un puesto 40-50.
La pregunta en ese contexto es qué equipo irá a por Juan Núñez. Si alguien apuesta verdaderamente por él para este año debe ser un equipo de la zona baja sin prisas por crecer. La reconstrucción obligada de los Nets, Wizards o Jazz son las opciones más claras. Aunque no sería raro imaginar una apuesta de los Spurs de Wembanyama.
A partir de ahí toca ver la decisión del jugador. Si el proyecto no tira de él para el primer año, lo más lógico es imaginar al exmadridista vestido de blaugrana para la 24/25. Todos los rumores apuntan a su fichaje por el Barcelona siempre que no aparezca entre los 30 picks iniciales, donde tiene contrato asegurado. Pero la locura de un draft dividido en dos días permitirá más negociaciones, más movimiento de picks y quizás una sorpresa para Núñez esta madrugada.