El primer equipo masculino de Valencia Basket vuelve a casa para afrontar el tercer y definitivo partido de su eliminatoria de cuartos de final del Playoff de la Liga Endesa que le enfrentará al UCAM Murcia (sábado 25, 20:45 horas, Fonteta, Movistar+ Deportes) que decidirá al cuarto equipo que alcanza esta temporada las semifinales. Tras conseguir recuperar el factor cancha con una sólida victoria en la fortaleza murciana por 72-83 en el segundo choque de la serie, el equipo taronja intentará por segunda vez en unos cuartos de final acb remontar una eliminatoria en la que empezó perdiendo el primer partido en casa (solo lo consiguió en la temporada 2018-19 ante Unicaja). El entrenador Xavi Albert tendrá un ojo puesto en la enfermería hasta el último momento: a las bajas confirmadas de Boubacar Touré y Kevin Pangos se unen la duda hasta el último momento de los tres jugadores que no pudieron acabar el partido en Murcia por lesión: Chris Jones, Semi Ojeleye y Damien Inglis. Pese a todos los condicionantes físicos, los efectivos disponibles del equipo taronja tratarán de sacar partido de contar con el apoyo de una afición que le recibirá con un tifo de pañuelos taronja para hacerse fuerte ante un rival que ha ganado en seis de sus últimas trece visitas a la Fonteta, incluyendo el primer choque de esta serie.
El UCAM Murcia afronta por segunda vez en su historia un tercer partido de cuartos de final del Playoff acb como visitante, con la intención de repetir la actuación y el resultado del primer partido de la eliminatoria con la ilusión de conseguir su primer pase a las semifinales de la Liga Endesa. Aunque no pudo aprovechar su oportunidad de sentenciar la serie en su partido en el Palacio de los Deportes, el conjunto universitario se ha repuesto a sus ausencias interiores con una excelente versión de Dustin Sleva, el jugador más valorado de su equipo en esta eliminatoria, Moussa Diagne y el extaronja Jonah Radebaugh.
El entrenador Xavi Albert comentaba en la previa del encuentro que “afrontamos este tercer partido después de un partido de mérito, trabajado y competido en Murcia donde salvamos el match-ball y devolvemos la serie a casa, a la Fonteta. Empezamos de cero, todo se resuelve en 40 minutos y tenemos la suerte de poder jugar rodeados de los nuestros. Es un partido a todo o nada pese a nuestra historia. Solo hemos conseguido superar una vez en cuartos un 0-1 en contra en toda nuestra historia y fue con Jaume. Y la otra vez fue en la final el año de Pedro. Y me parecen dos grandes referentes que nos marcan el camino de poder igualar algo que en todos nuestros años de historia se ha conseguido tan pocas veces. Con la confianza de poder hacerlo en la Fonteta. No nos quedan tantas noches de Playoff, en la Fonteta. Ojalá sean muchas más, no seré yo el que marque los plazos de cuando haremos la mudanza pero le quedan pocas noches de Playoff y para todos los que hemos vivido tantas noches de Playoff y de emociones en este campo, me gustaría ver una Fonteta de gala. Es un deseo, no una demanda. Que se ponga guapa, que apriete y que podamos ver el espectáculo de ver a nuestros jugadores dejarse la piel como hicieron en Murcia. Aún tenemos que evaluar, pero todos quieren dar el 100% y queremos que la gente esté orgullosa del esfuerzo que nos dejemos en la pista”.
Además de las ausencias ya conocidas de los lesionados de larga duración Boubacar Touré y Kevin Pangos, el equipo taronja vive especialmente pendiente de la enfermería para saber con cuántos de sus efectivos podrá contar después de que Chris Jones (pierna izquierda), Semi Ojeleye (espalda) y Damien Inglis (rodilla izquierda) no pudieran acabar el segundo partido de la serie por lesión. El técnico taronja comentaba en la previa que “todos trataron de jugar con todo, todos querían jugar al límite, pero hubo situaciones de partido en las que no pudieron dar más de sí. Brandon ya no lo contamos como lesionado pero continua prácticamente sin entrenar en pista desde hace 20 días y tiene la calidad y la experiencia de acabar de encontrar la manera en el rato que tiene de prepararse mentalmente para el partido y acabar ayudándonos. Ayer fue día de hospital de campaña, de lo que se ve, porque al final estos son los más palpables porque están en rojo y hay más jugadores con más situaciones clínicas. Ayer fue día de servicios médicos y hoy pista. Y según lo que marque la pista y de las sensaciones que veamos, cerraremos la convocatoria para mañana. No será una excusa ni para bien ni para mal. En el último momento los jugadores y los servicios médicos los que evaluarán al final. No queremos poner en ningún riesgo a ningún jugador pese a la voluntad que tienen de jugar. Y si no está alguno, iremos a la filosofía de este Club que es el siguiente hombre disponible. Con los que seamos, competiremos”.