El fichaje que buscaba el Barça
Anda el FC Barcelona pendiente del mercado de fichajes de cara al próximo verano. En las oficinas del Camp Nou son conscientes de que necesitan fichar a un delantero, pues la llegada de Kevin Prince Boateng se antoja como un parche a corto plazo. De hecho, el alemán ni siquiera ha entrado en las dos últimas convocatorias del Barça. Ese interés en fichar un delantero llegaba precisamente en un mal momento de Luis Suárez, que deja patente que el paso de los años afecta a todo ser mortal y que empezaba a dar signos de debilidad. Pero...
Pero llegó el Santiago Bernabéu y ahí estaba Luis Suárez. Tuvo media ocasión y marcó dos goles y medio. Ni tan mal. El uruguayo, como el resto del equipo, estaba haciendo un partido algo discreto en ataque, pero la primera que le llegó en la segunda parte la mandó al fondo de la red. Suárez aprovechó una asistencia de Dembélé desde la izquierda y estuvo más listo que Sergio Ramos: le bastó un toque sutil para dinamitar la eliminatoria.
No contento con ello, otra asistencia de Dembélé desde la banda contraria provocó el segundo gol del Barcelona. Lo marcó Varane en su portería, pero bien podríamos apuntarlo también para el uruguayo, que propició que el francés no tuviera más remedio que meter el pie ante la mirada de Keylor Navas. El trabajo estaba hecho, pero Luis Suárez quiso más: contragolpe, quiebro en el área y pisotón de Casemiro. Un penalti que tantas veces han visto en el Santiago Bernabéu en la portería contraria: a lo Panenka, para gustarse, para elevar el 0-3 al marcador y para dejar sentenciado al Real Madrid.
Probablemente, el Barcelona seguirá peinando el mercado de fichajes en busca de un delantero, al igual que hace el Real Madrid ante su evidente falta de gol. Pero en los grandes momentos, siempre aparecen los grandes jugadores. Y ahí está Luis Suárez, el delantero que necesitaba el Barça.
