Berenguer, ante el debut en un San Mamés silencioso

Seguro que el cuarto fichaje más caro de la historia del Athletic Club, Álex Berenguer, no esperaba que su debut en San Mamés como jugador rojiblanco tuviera el eco sordo de las gradas vacías de la Catedral debido a la pandemia. Ante el Levante UD oirá bien las instrucciones del banquillo, los comentarios de compañeros y rivales, pero no la voz de los athleticzales. Para eso habrá que esperar aún.

Todo indica que esa vacío es uno de los factores que ayudan a acumular 4 derrotas consecutivas en Bilbao, lo nunca visto. Es más, seguro que el navarro llegado del Torino tampoco esperaba aterrizar con la tormenta que se desató en su nuevo equipo tras las derrotas ante el Cádiz CF y el Deportivo Alavés o la chirriante forma de despachar por parte del Club el affaire Fernando Llorente.

En el tropiezo de Mendizorrotza ya tuvo hasta tiempo de jugar unos minutos con un único entrenamiento a sus espaldas en Lezama. Fue llegar, firmar y jugar... Sin duda significativo de que vivimos tiempos de zozobra en el terreno deportivo con el equipo colocado en el sótano de la tabla, si bien cuenta con un partido aplazado a disputar ante el FC Barcelona.

Berenguer, a echar una mano cuanto antes

La resurrección de los de Gaizka Garitano es inaplazable en el tiempo. El técnico de Derio tiene cuatro partidos por delante antes de encarar un nuevo parón de la competición en LaLiga Santander. Se espera que Berenguer pueda aportar su frescura mental en busca de unos puntos que estabilicen la situación.

El míster tiene en su cabeza usarlo en banda derecha pese a su gran polivalencia, en lo que debe ser de inicio un mecanismo de presión sobre un Iñaki Williams perdido entre brumas. No marca desde el 8 de marzo y la medicina del banquillo puede ser a veces el mejor remedio.

Aunque no participaba en el amistoso ante el Real Valladolid imaginamos que Berenguer habrá ido haciéndose a los compañeros y al sistema en estos días de entrenamientos en los que para un recién llegado todo es nuevo. Su adaptación ha de ser lo más rápida posible.

El Athletic está estancado en ataque...

Tres puntos de 12 posibles, 2 goles a favor y 5 en contra... Mejor dejar los números aparcados para centrarse en focalizar toda la atención en batir a los granotas. De Berenguer se espera que su desborde, su capacidad de pase y hasta de hacer algún gol sean una ayuda tangible.

No cabe tildarle de salvador, eso sería añadirle un peso extra injusto, pero suele cumplirse que el que llega nuevo suele tener la cabeza limpia y más despejada que el resto

En la memoria reciente quedaba el caso de Aritz Aduriz. Quien tuvo que esperar a su primer regreso al Athletic tras el periplo por el Burgos y Valladolid para estrenarse como goleador con la casaca rojiblanca. 

El entonces presidente, Fernando Lamikiz, pagaba tres millones por él al conjunto pucelano y el delantero donostiarra los devolvió con creces siendo el alma del equipo en una temporada durísima. Aparte de la calidad el venir sin mochilas ni adherencias previas otorga un plus.