El Athletic ya le sacó al Bayern un 17% más por Lizarazu
El Bayern anda con pies de plomo ante la negativa del Athletic a negociar el fichaje de Javi Martínez. Los alemanes quieren al centrocampista navarro. De hecho, tienen preparados los 40 millones de su cláusula para depositarlos en la LFP. La razón de que aún no hayan puesto el dinero ante el citado organismo es que temen una reacción rojiblanca que eleve el montante de la operación. Existen ciertos resquicios legales a los que el club bilbaíno puede aferrarse para defenderse de los golpes de talonario que merman su plantilla sin su consentimiento. Josu Urrutia, a diferencia de lo que hizo su predecesor (Fernando García Macua), no ha advertido públicamente que vaya a obligar al futbolista a depositar su cláusula, con el consiguiente gravamen del 50% de IVA (20 millones) que encarecería el traspaso sustancialmente. Tampoco ha dicho que vaya a denunciar al club bávaro ante la UEFA o la FIFA reclamando la vigencia de las cláusulas únicamente a nivel estatal. Pero tampoco ha accedido a reunirse con los responsables del Bayern pese a las reiteradas peticiones. "Parece ser un hombre muy orgulloso", opina Rummenigge. En Alemania no se fían.
La amarga experiencia en el fichaje de Bixente Lizarazu ejerce de alerta en estos momentos. En la temporada 1997-98, este mismo equipo llegó a Bilbao con la firme intención de hacerse con los servicios del defensa de Iparralde. No tardó en convencer al jugador con su suculenta oferta. La directiva rojiblanca -presidida entonces por Arrate-, sin embargo, no estaba dispuesta a dejar marchar a un futbolista habitual en el once y por el que había pagado 310 millones de las antiguas pesetas al Girondins.
Los alemanes no atendieron a la negativa del club bilbaíno, depositaron los 700 millones de su cláusula y se lo llevaron a Alemania. El Athletic, ofendido, se aferró al decreto 1.006 de la UEFA y denunció a los muniqueses ante el organismo, que acabó dándole la razón. El pago de la cláusula es suficiente dentro de la Liga, pero en caso de no haber acuerdo entre los clubes puede no serlo cuando el comprador viene de otro país. Eso fue lo que decidió la UEFA, que obligó al Bayern a pagar 120 millones de pesetas más. El gesto encareció un 17% la operación. Lo que en el caso de Javi Martínez serían 7 millones de euros. Un dinero que recalaría directamente en las arcas de Ibaigane, en lugar del IVA, que simplemente sería un perjucio para el club comprador y para el jugador en forma de impuestos.
