Los pájaros le revolotean a Kepa

La teoría del caos funciona en toda la naturaleza, y el fútbol profesional, tan disparatado, tampoco es ajeno a ella. Por ejemplo, en muy poco tiempo, apenas unos días, encastillado en su silencio, la situación parece haberle dado un vuelco completo al todavía portero del Athletic Club Kepa Arrizabalaga. Al que todos veían buscando piso en Madrid el 2 de enero y al que ahora nadie acierta a pronosticar su horóscopo.

El llamado a ser "futuro icono vizcaíno" de la Catedral, el presunto "sucesor de Iribar", ha pasado de tener todas las cartas de la baraja en la mano para realizar, ya, su fichaje por el Real Madrid, a ver como se tambalea/retrasa la operación. Y con ello hacer peligrar, por supuesto, su presencia en el mundial de Rusia 2018, escaparate al que en todo caso iría de suplente de David de Gea.  Los acontecimientos se han vuelto imprevisibles. De entrada, Zinedine Zidane es capaz de enfrentarse a Florentino Pérez, aunque él lo niegue en rueda de prensa, porque no quiere que se le desestabilice el vestuario, poderoso protector de Keylor Navas. El técnico galo dice y reitera que no necesita ningún fichaje hasta el mes de junio, frenando públicamente las ansias de su presidente y de Arrizabalaga de hacerse la foto en el Bernabéu.  

Nadie gana con este nuevo escenario   Eso por la zona merengue. Pero claro, si te quedas hasta junio en Bilbao la situación sería por lo menos agobiante, ya que ahora mismo la opinión pública ya no ve tan claro que el culpable de este culebrón sea tan solo Josu Urrutia y sus artes negociantes. Es más, el propio Cuco Ziganda, sin necesidad de presiones, por motivos físicos y deportivos, no le garantiza la titularidad en el Athletic en lo que resta de campaña.   Para completar la ziaboga que amenaza con desenfilar la nave del ondarrutarra, el Club rojiblanco mueve ficha. La renovación firmada al que antes parecía medio fuera, Iago Herrerín (29 años) hasta 2021, y tratar de amarrar tanto a Alex Remiro (22 años) como a Unai Simón (20 años), dejan ver bien a las claras que se da al portero del futuro por perdido y que el de Basurto sí es de los que "se quiere quedar" y cumplir su sueño de ser el titular de San Mamés.   Situación que deja al representado de Bahía Internacional en tierra de nadie en un momento en el que encima está lesionado desde Riazor. Si bien en Bilbao se descarta que pase por el quirófano, se opta por un tratamiento conservador, mientras que se habla de que en Madrid casi prefieren que lo haga, tal vez para ahorrarse otro zafarrancho con la liga perdida y dejar que Kepa pase el tiempo hasta junio refugiado en la sombra.  En resumen, se encuentra en un auténtico impass el frío hombre de hielo, el amante de los pájaros cantores, sus jilgueros, que ahora mismo ve como se le ha revolucionado la pajarera a niveles de la película de Alfred Hitchcock. Malo para Kepa y malo para el Athletic, porque, aparte del mal rollo social al uso con seis meses por delante en Lezama, si se va en verano gratis se avecina tormenta gorda sobre Ibaigane en período preelectoral.
De verdad, Kepa, aunque el Madrid te pague el doble y a día de hoy parezca más descabellado que nunca, lo mejor para todos es que renueves. Estás a tiempo. Arréglalo. Hazle caso a Beñat. 
@asismartin