Borja Viguera, pichichi de Segunda con el Alavés, cuesta 1 millón de euros

Borja Viguera, de 26 años y con una planta de 1’85, no ha generado ningún movimiento en los despachos del Athletic, aunque sí de otro club de Primera que sopesa su incorporación. El ariete riojano, criado en la cantera de Zubieta y pichichi en Segunda División con 9 goles, acaba contrato en 2015 y su cláusula en el Alavés es asequible:1 millón de euros. En este 2013 se ha destapado como sus cualidades innatas ya apuntaban desde su época en el filial de la Real. 
Viguera, el jugador más desequilibrante del Alavés la pasada temporada, la de la consumación del ascenso a Segunda, se estira aún más en el presente ejercicio, pese a la lógica mayor exigencia que requiere. Pichichi actual con 9 goles en la categoría de plata, de los 19 del total del equipo, el atacante logroñés alcanzó en mayo ante el Jaén, donde además selló el ascenso de su equipo, los 30 compromisos ligueros disputados (con un mínimo de 45 minutos) en el Alavés. De esa forma, cristalizaba la cláusula de renovación que se incluyó en su contrato cuando decidió abandonar definitivamente la Real, tras varias cesiones en Nàstic y Albacete. En Vitoria va alcanzando su mejor versión, aunque su progresión, tardía por las lesiones, competencia y lesiones, no cesa. Sólo el empuje de los Agirretxe y Vela le descabalgaron de la senda de la Real, donde tenía fama de técnico e irregular. En la campaña 2009-10 apenas jugó cinco partidos en su primer equipo. 
Buque insignia del Alavés, ya se erigió en su máximo goleador del pasado ejercicio con 21 tantos entre Liga, Copa y playoff. Desequilibrante en los metros finales y recuperado para de orillar unos años lastrado por una severa lesión de rotura de ligamentos de una rodilla. La dirección deportiva albiazul se guardó esa cláusula de renovación unilateral para asegurarse su continuidad para liderar su nuevo proyecto.  
Sólo el delantero del Sporting Scepovic aguanta su ritmo endiablado. Viguera no sólo vive de sus goles, nunca se había distinguido especialmente por ellos, ya que aúna visión de juego, calidad técnica y desborde, sorprendentes por su envergadura. Su valor en el mercado se ha incrementado exponencialmente y más por su accesible cláusula de 1 millón. El Alavés no desdeñaría una venta negociada de su hombre franquicia, ante la necesidad de cuadrar sus cuentas. El club albiazul es consciente que en verano se pueden producir novedades, sobre todo si el club de Primera que valora su captación se decide a desembolsar su caché.  
El Athletic tiene en nómina a Aduriz, Kike Sola y Toquero en la primera plantilla, más el empuje en cascada de Guillermo, Williams y Villalibre en los tres primeros escalones de su cantera, por lo que, en principio, el cupo está bien cubierto. No obstante, Viguera gusta, ya seducía desde su época en el que, en las filas de la Real Sociedad B, venció casi él sólo, un derbi en Lezama ante el Bilbao Athletic. Como en el caso de Illarramendi, siempre descollaba en este tipo de duelos vecinales.
@javirbeltran10