Dos golazos para acabar con la mala racha

Dos golazos, de Manu Vallejo y Jairo, firmaron la victoria del Cádiz en Lugo. Otra vez una alegría en el Anxo Carro en un partido que empezó con disgusto y que terminó con un merecido triunfo por las ocasiones falladas por los amarillos.

Fue el Lugo el primero en avisar con una jugada entre Iriome y Dongou que concluyó con un disparo de éste que se estrelló contra el lateral de la red. El partido estaba marcado por una fuerte lluvia desde el mismo inicio, lo que condicionaba el juego en muchas jugadas.

Pero a los locales no parecía influirles. Sergio Sánchez evitó el primero en una buena jugada de Iriome por la derecha y, acto seguido, Edu Ramos, cometió un penalti absurdo y Carlos Pita adelantó a los suyos cuando sólo se habían jugado once minutos.

Volvía a verse ese Cádiz sin personalidad ni concentración, engullido por un rival que se limitaba a tener una mejor actitud. En ese momento sí empezó a tener la pelota, seguramente también porque el rival ya le cedía gustoso un espacio para que la tuviera en tierra donde no creaba peligro.

Y si en una acción individual de Edu Ramos el Cádiz se había puesto por debajo, gracias a una acción genial de Manu Vallejo empató en el minuto 18. Recepcionó con el muslo un gran pase de Álex y comenzó a regatear a defensas hasta definir con calidad delante de Juan Carlos.

Tenía que servir este gol para que el Cádiz espabilara y dejara de ser tan blando. Era un partido con poco ritmo entre dos equipos bien puestos y en el que el chispazo más importante lo había puesto Vallejo. El criterio en el Cádiz lo ponían Álex y Aketxe, pero era necesario que apareciera Jairo para tener más peligro en ataque.

Dongou se plantó delante de Cifuentes con demasiada facilidad en el minuto 36, pero Marcos Mauro le negó el remate. El equipo tenía que cerrar mejor el camino a su oponente para no tener que nada de nuevo contra corriente.

En el inicio de la segunda parte estuvo a punto de marcar Álex, pero su disparo con la izquierda salió fuera por muy poco. El Cádiz presionaba y parecía que había cambiado el chip para no ser sólo un equipo bien posicionado. Vallejo estuvo a punto de hacer el segundo con un disparo a la media vuelta que se marchó alto por muy poco.

También la tuvo Aketxe en el minuto 60 con un disparo ideal después de un mal rechace de la zaga local, pero el vasco no está inspirado y el balón salió rozando el palo. Ya se merecían los de Cervera ir por delante, pero faltaba acierto para imponerse. Daba la impresión de que si el equipo arriesgaba un poco más podría llevarse los tres puntos, siempre que no se descuidara en exceso en defensa.

El equipo había dado un paso adelante y Cervera daba entrada a Perea por Aketxe cuando quedaban unos 20 minutos. El Lugo inquietaba a base de centros, pero eran los cadistas los que tenían las ocasiones más claras. Con el paso de los minutos el Lugo empezó a apretar y el Cádiz abusaba del pelotazo en largo. En una jugada elaborada, Jairo dejó solo a Vallejo delante de Juan Carlos, pero se precipitó y no llegó a rematar.

Era desesperante la de ocasiones que desperdiciaba el equipo amarillo para lograr una victoria tan necesaria. A la contra tenía espacio para hacer daño, pero o fallaba el último pase o el remate definitivo. Hasta que en el minuto 86 Manu Vallejo se inventó otra genialidad para combinar con Álex, que combinó con Jairo y éste marcó un golazo con su pierna buena.

Había que aguantar en el tramo final para hacer bueno ese esfuerzo ofensivo. Había fallado cinco ocasiones claras antes de ponerse por delante y ahora el reto era sufrir para no dejar escapar el triunfo. Cristian Herrera dio el susto con una volea ya en el tiempo de prolongación, pero ya no pasó nada más y el cadismo respiró tranquilo al fin. Va por Baguetina.