El Cádiz prolonga ante el Espanyol su inercia positiva

El Cádiz fue capaz de ganar a un equipo de Primera en un partido donde fue capaz de tener oficio y ambición. Sí, lo importante es ganar al Elche y al Reus, pero ahora podrá soñar también con pasar la eliminatoria si es capaz de mantener su inercia.

Y sucedió algo inesperado desde el mismo arranque. Un mal pase del portero Roberto fue aprovechado a los 20 segundos por Lekic, que robó el balón y marcó a bocajarro. Era un inicio inesperado y el Espanyol parecía muy tocado. Dio señales de vida con un remate de cabeza de Javi Puado que salió fuera a los cuatro minutos.

Cervera había alineado un once con muchas novedades y recuperaba el esquema más clásico de 4-2-3-1, con Lekic en la punta del ataque. En cualquier caso era un sistema abierto porque Salvi en muchas ocasiones jugaba como delantero puro, con mucha movilidad por todo el ataque.

El equipo espanyolista empezó a generar juego por la banda derecha a través de Rosales y siempre con la calidad de Piatti y Baptistao como referencia en el ataque. Pero pudo hacer el segundo de nuevo Lekic en el minuto 23 en una gran acción de Agra por la derecha, plena de intensidad. El balcánico no llegó por muy poco a un centro definitivo del luso.

Era un típico partido de Copa porque había ocasiones en las dos áreas. David Gil salvó el empate en el minuto 25 con una gran intervención en una acción de Pedrosa por la izquierda que acabó con un remate de Baptistao en el que el cancerbero amarillo se lució. En esos momentos del primer tiempo daba la impresión de que el empate era cuestión de tiempo porque el equipo de Rubi llegaba al área cadista con frecuencia y también con peligro.

Y el gol llegó a los 35 minutos con una jugada fantástica de Puado. Recortó con un caño a Mauro y superó a David Gil picándole el balón en su salida. Era algo merecido por el cariz que estaba tomando el partido desde hacía un rato. Pero la Copa es imprevisible y el Cádiz volvía a ponerse por delante con un golazo de Karim Azamoum de cabeza en un centro de Agra. Era el minuto 40 y el partido tomaba otra dimensión. Salvi pudo hacer el tercero antes del descanso con un lanzamiento raso desde fuera del área.

La segunda parte comenzó con dominio del Espanyol y con un serio aviso de Víctor Sánchez, pero su disparo se marchó fuera por muy poco. El Cádiz esperaba agazapado para matar a la contra. Cervera quitaba a Agra para dar entrada a Jairo y Salvi pasaba a la banda derecha, la suya. El equipo estaba llegando con peligro y Lekic tuvo en sus botas el tercero en el minuto 62, pero falló incomprensiblemente delante de Roberto.

El Espanyol elaboraba mucho y no daba un pelotazo. Eso le daba ventajas al Cádiz para presionar arriba y robar. El partido entraba en los últimos 20 minutos con el equipo cadista ganando, pero con mucho por decidir. Pedrosa seguía haciendo de las suyas desde el lateral zurdo y estuvo a punto de empatar con un disparo cruzado en el minuto 70.

Entraba Carrillo y el Cádiz terminaba el partido con dos delanteros de referencia, ya que Lekic seguía sobre el campo. El Espanyol tenía el mando, pero los locales podían hacer mucho daño en ataque ante un rival que evidenciaba problemas a nivel físico. Sin embargo, la ocasión clara la tuvo el Espanyol con un remate claro de Puado tras un mal despeje de Carmona, pero el balón se le fue alto en el minuto 81.

La entrada de Borja Iglesias se estaba notando porque el exjugador del Zaragoza creaba peligro, incluso cuando no estaba dentro del área. Pero fueron pasando los minutos y en el tramo final el equipo cadista se mostró muy fiable para frenar los últimos intentos de un Espanyol que no se conformaba con haber marcado fuera de casa. Buen triunfo para confirmar que el Cádiz ha vuelto.