Las malas sensaciones del Cádiz fuera de casa

Cuando se han jugado 27 partido de liga, el Cádiz está a sólo una victoria de firmar la salvación y poder centrarse en objetivos mucho más altos. El equipo amarillo está asentado en los puestos de ascenso pero, aunque está cuajando una gran temporada, está dando la sensación de desinflarse cuando juega fuera del Ramón de Carranza.

El curso, en líneas generales, está siendo magnífico para el Cádiz. Recibe pocos goles, marca con asiduidad, ha hecho de su estadio un fortín y fuera de casa está sacando bastantes puntos. Pero la sensación que trasmite el equipo lejos de su estadio es de estar bajo de forma y haber perdido ritmo.
Los números contradicen estas sensaciones, ya que los cadistas son los quintos mejores visitantes de la categoría y en 13 partidos han ganado cinco, han empatado tres y han perdido otros cinco. La inquietud viene cuando se observa que el equipo no ha podido ganar en sus últimos cuatro desplazamientos, y en varios de ellos casi ni se asomó a la meta rival.
Contra el Tenerife los amarillos empataron a uno en un partido muy planto, igual que contra el Nástic en el 0-0 jugado en Tarragona. Las peores sensaciones han sido en las derrotas frente al Alcorcón y Numancia, donde el equipo no ha podido reponerse al gol recibido y no ha tenido reacción.
Los números dicen una cosa, las sensaciones otras. Habrá que ver como se comporta el Cádiz la próxima vez que tenga que jugar lejos de casa, será frente al Osasuna en uno de los campos más complicados del fútbol español.