Carlos de Torres,Redacción deportes, 5 dic (EFE).- Carlos Rodríguez (Almuñecar, 18 años), cambiará en unos días el maillot del Kometa Fundación Alberto Contador por el del Ineos, el equipo de Egan Bernal, Chris Froome y Geraint Thomas, los últimos ganadores del Tour de Francia, un salto inesperado que despierta los sueños más altos del ciclista andaluz., Rey del calendario español durante sus dos años en la categoría junior, con dos campeonatos nacionales contrarreloj (2018 y 2019) y una etapa e
Carlos de Torres
Redacción deportes, 5 dic .- Carlos Rodríguez (Almuñecar, 18 años), cambiará en unos días el maillot del Kometa Fundación Alberto Contador por el del Ineos, el equipo de Egan Bernal, Chris Froome y Geraint Thomas, los últimos ganadores del Tour de Francia, un salto inesperado que despierta los sueños más altos del ciclista andaluz.
Rey del calendario español durante sus dos años en la categoría junior, con dos campeonatos nacionales contrarreloj (2018 y 2019) y una etapa en la Volta a Valencia, contra rivales élite-sub23, sus éxitos internacionales en el Tour de Gironde (2019), el bronce en el Europeo en línea (2018) y el sexto en la París-Roubaix (2018) no pasaron inadvertidos a ojos de los cazatalentos.
Los técnicos del Ineos se fijaron en Carlos Rodríguez, residente en Málaga, donde estudia ingeniería mecánica y eléctrica. A mediados del pasado mes de julio, ya sabía que iba a vestir el maillot del Ineos, el mejor equipo del World Tour, y en octubre se concretó el compromiso por 4 temporadas.
"Es un sueño hecho realidad, se cumple la aspiración que persigue todo corredor. Voy al mejor equipo del mundo, y es cierto que produce un poco de vértigo, pero estoy preparado para el retro, no para ganar, pero si para ayudar al equipo en lo que sea necesario", declaró el ciclista andaluz a EFE.
Un salto de juvenil a profesional de la máxima categoría que Rodríguez no recomienda "a la mayoría de los corredores" juveniles, aunque en su caso considera que cumple con la premisa de estar preparado "física y mentalmente".
"Es un cambio muy fuerte, pero he hablado con mi preparador y mi representante y decidimos dar el paso. No ha sido una decisión tomada a la ligera, sino producto de analizar mis datos y viendo si puedo estar al nivel del World Tour. En principio con la idea de poder competir, aunque no sea para ganar. Ir al Ineos es la mejor opción para desarrollarme como ciclista".
De momento el estreno será una incógnita, algo "que se verá el año que viene".
"No voy a destacar, simplemente quiero dar un nivel en las carreras que me permita al menos no descolgarme en el primer kilómetro y sobre todo aprender el máximo posible. Me tendré que adaptar a la exigencia de ir al límite todo el año".
Rodríguez tiene espejos donde mirarse, casos de juveniles convertidos en profesionales, y además con grandes triunfos, como el belga Remco Evenepoel, ganador de la Clásica de San Sebastián, y el esloveno Tadej Pogacar, tercero en la Vuelta con tres triunfos de etapa.
"Son dos talentos del ciclismo. Cada uno es diferente, pero no me comparo con ninguno, ellos tienen su genética y sus condiciones. Me gustaría estar a su nivel en el futuro, pero el año que viene no persigo estar a su nivel, hay que ir poco a poco".
En unos días, Rodríguez coincidirá en la primera concentración del Ineos con sus ídolos, entre los que tendrá muchos ejemplos a seguir. Destaca su admiración por el cuádruple ganador del Tour Chris Froome, "en lo personal, por cómo se cuida y espíritu de sacrificio".
Si se trata de buscar alguna semejanza, Carlos Rodríguez se atreve a señalar al colombiano Egan Bernal.
"Quizás me parezca un poco a él por las condiciones. Me considero un escalador al que le va bien la crono, con punta de velocidad, llegar a ese nivel es mi aspiración, el objetivo. No sé si lo conseguiré, pero hay que apuntar alto- Esto es como en los estudios, si vas a por un 10 sacas un 7, pero si vas por el 5 te dan un 3".
Rodríguez considera que ser buen contrarrelojista "es una característica necesaria en el ciclismo actual" y se considera como "un ciclista completo, el mejor en nada, aunque me defiendo en todo"-
Todo ha pasado muy rápido para esta promesa del ciclismo español que desde nilo destacó en la práctica de cualquier deporte, hasta que descubrió en categoría cadete que lo suyo era la bicicleta de carretera.
Ahora el futuro se le abre en el horizonte. Sueña con ganar algún día el Tour de Francia, como su admirado Alberto Contador, alguna clásica de las importantes o incluso el Mundial.
"Alberto Contador es mi ejemplo a seguir, por la forma que tenía de meterse en las carreras, siempre atacando para ganar. Este año he seguido su estilo. Ahora llego al Ineos a hacer lo que me digan, pero si puedo atacar lo haré y daré lo mejor de mi".