Jonas Vingegaard sigue generando mucha preocupación por su fuerte caída en Itzulia. El ciclista danés fue uno de los peor parados en la caída del descenso y desde que no podía moverse del suelo, los médicos se dieron cuenta de que su caso era mucho más serio que el del resto de sus compañeros.
Desde que el pasado jueves ingresó en el hospital Txagorritxu de Vitoria, Vingegaard ha permanecido en la UCI (Unidad de Ciudados Intensivos) después de que el pasado lunes fuese operado para hacerle un seguimiento exhaustivo del neumotórax y que, según ha podido confirmar As, la sensaciones es que evoluciona lento pero positivo: "Una operación satisfactoria. Pasará las próximas semanas recuperándose", notificó Visma-Lease a Bike en su comunicado oficial
Una noticia que ha hecho que a su familia se le haya planteado la opción de trasladar a Jonas en un avión medicalizado para continuar con el tratamiento en Dinamarca, su país natal. Aunque la decisión aún no está tomada, se espera a que en los próximos días se realice cuando esté mejor físicamente para el vuelo.
Todo el mundo del ciclismo está pendiente de saber si Vingegaard puede llegar en condiciones para el Tour de Francia que arrancará el próximo 29 de junio. Aunque aún restan dos meses y medio para la cita, las expectativas no están claras y varían en función de como será el trascurso de las semanas.
Hay que tener en cuenta que en su parte médico además del neumotórax figuraba fractura de clavícula y varias costillas rotas, lo que le genera problemas pulmonares que le dificultan la respiración, algo vital para el ciclismo: "No está claro cuánto tiempo le llevará. Jonas se encuentra bien y quiere expresar su gratitud a todos por sus bonitas palabras en estos últimos días", explicó su equipo cuando iba a ser operado.