El Seat Tarraco tiene un problema (y es muy gordo: lee esto)

Ojo porque en Seat están más que preocupados. Sobre todo en referencia al Seat Tarraco. Y es que si ya el SUV de siete plazas español estaba teniendo serios problemas para posicionarse como una de las mejores alternativas en el mercado, ahora no es otro que el Mazda CX-8 el que le va a poner las cosas aún más difíciles.

Y es que el modelo japonés ha sufrido un lavado de cara tras dos años de su lanzamiento al mercado que, como bien saben en Seat, hace de este SUV de siete plazas una de las opciones más elegantes del mercado.

Como es habitual en la marca asiática, el diseño es una de las principales armas de este CX-8. Los japoneses ya diseñaron un modelo más que atractivo que ahora han mejorado con pequeños detalles destinados a hacer la vida más fácil a sus ocupantes.

El nuevo Mazda CX-8

Detalles como un botón de acceso directo para entrar en la tercera fila de asientos, tapicería de cuero, conexiones USB e incluso asientos calefactables en la segunda fila. Por otro lado, también han mejorado las posibilidades de equipamiento y acabados.

Es más, Mazda ha lanzado con este lavado de cara una edición especial llamada Exclusive Mode que, como su propio nombre ya presupone, acaba convirtiéndose en la más exclusiva de todas.

En cuanto al apartado mecánico, dos opciones. Una de gasolina con un Skyactiv-G 2.5 litros y otra diésel con un motor Skyactiv-D 2.2 litros. En ambos casos llegan junto a un cambio automático de seis velocidades y con la opción de escoger entre tracción total o tracción delantera.

Pero lo mejor de todo y lo que más preocupa a Seat es que el modelo básico del CX-8 tiene un precio de partida de tan solo 24.430 euros. Un precio que, teniendo en cuenta que Mazda está un escalón por encima de la marca española, muchos lo consideran un auténtico chollo.

Es más, ya son muchos en las redes los que apuntan que, por ese precio, prefieren apostar por un SUV casi premium como es el Mazda CX-8 que por una generalista como es el Seat Tarraco.