Citroën ha vuelto a demostrar que los suyo no son precisamente los diseños convencionales. Y es que el nuevo Citroën C4 es un coche difícil de catalogar. Como suele ser habitual en la marca francesa, el diseño es uno de los puntos fuertes de este nuevo compacto que se queda a medio camino entre un crossover y un SUV.
Un C4 con el que los galos pretenden plantar cara a modelos muy asentados en nuestro mercado, de ahí que hayan iniciado su comercialización con una oferta a lo grande. Ahora, como bien podemos ver en su configurador, podemos hacernos con uno de ellos por 18.390 euros. Un precio que, en teoría, es una ganga.
El problema de esta oferta, si es que se le puede llamar problema, es que deberemos financiar la compra con Citroën. La financiación deberá ser de cómo mínimo 6.000 euros con una permanencia de 36 meses. Por otro lado, deberemos entregar nuestro antiguo coche.
Hasta aquí todo más o menos normal. El verdadero problema es que por apenas 2.200 euros más podremos también ir a por un Citroën C5 Aircross, un modelo que quizás no llama tanto la atención en cuanto a diseño pero que es mucho más grande, con más espacio interior y mucho más cómodo.
Si tu idea es hacerte con el nuevo C4, la oferta va ligada a la versión que llega con un motor 1.2 Puretech de 130 caballos de potencia. Una mecánica que fija un consumo de 5,4 litros a los cien según e ciclo WLTP y que rinde más que bien.
Por lo que respecta al equipamiento, la versión Feel llega también muy bien dotada de serie, así como con muchas ayudas a la conducción demostrando que en Citroën han dado un importante paso adelante al respecto.