El Volkswagen Golf, el Seat León o el Renault Mégane no son los únicos compactos recomendables a los que podemos optar en el mercado. Existen otras opciones igual de válidas que pueden costarte bastante menos que el alemán, el español o el francés. Por ejemplo, el Ford Focus.
El compacto norteamericano no se alza como el más vendido, pero siempre registra buenos números. Y eso es gracias a bondades como su equipamiento de serie, su confort interior y comportamiento en la marcha, y un diseño que no pasa de moda.
Un Focus cuya tarifa oficial para acceder a la gama es de 21.889 euros. Sin embargo, la marca lo anuncia en su página web a un precio promocionado de 16.990 € si financias con la firma. Y atención a la letra pequeña porque te va a gustar.
Ford permite elegir los plazos y la entrada. Y esto es lo que nos ha ofrecido a nosotros proponiendo una entrada de 5.000 € y un plazo de 37 meses. La cuota mensual nos ha quedado en 137,61 euros al mes y una cuota final de 9.850,05 €, que al final se traduce en un pago total de 20.211,67 €.
La versión de acceso a la gama es el que se configura con un propulsor de gasolina EcoBoost de 1.0 litros que ofrece 100 CV de potencia y 170 Nm de par máximo, gestionado por un cambio de marchas manual de cinco velocidades y un sistema de tracción delantera.
Gracias a ello acelera de 0 a 100 km/h en 12,5 segundos y su velocidad máxima es de 185 km/h. Su consumo medio es de 4,6 litros cada 100 km.
Y en equipamiento incluye el acabado Trend. A continuación listamos algunos de los elementos más relevantes: