Los que lo han probado avisan: el único ‘pero’ del Mazda CX-5 165 CV Homura  

El Mazda CX-5 es uno de los SUV premium que cada vez tiene más presencia en nuestro país. Entre otras cosas porque, si bien es cierto que no es un modelo barato, se queda a medio camino entre los generalistas y los premium.

Un terreno en el que marcas como Mazda, Volswagen o Jeep, entre otras, se desenvuelven más que bien. En el caso de los japoneses, recientemente lanzaron al mercado una versión deportiva de su CX-5 llamada Homura.

Una versión que llega con una imagen más agresiva gracias a detalles como sus cristales tintados o sus retrovisores en negro. En cuanto al precio, es una opción muy a tener en cuenta: desde 34.400 euros la versión de 165 caballos.

El ‘pero’ del Mazda CX-5 Homura

Estamos ante un SUV que, como bien saben los que lo tienen en mente, destaca ante todo por su presencia. El lenguaje de diseño Kodo le queda como anillo al dedo, y con los detalles deportivos de la versión Homura, este CX-5 es una joya.

También lo es en cuanto a equipamiento. Cuenta de serie con elementos cómo pantalla para el sistema de infoentretenimiento de 10,25", An­d­roid Auto / Ap­p­le Car­P­lay, sis­te­ma de so­ni­do Bose con 10 al­ta­vo­ces, Head Up Dis­p­lay, cua­d­ro de instrumentos con pan­ta­l­la di­gi­tal de 7", fa­ros Smart Full LED adap­ta­ti­vos y cli­ma­ti­za­dor au­to­má­ti­co bi­zo­na, entre otras cosas.

El único pero de este CX-5 reside precisamente en su motor. Y es que, pese a contra con una potencia de 165 caballos, esta mecánica  2.0 Skyactiv-G que cuenta con sistema de desactivación de cilindros no acaba de tener la fuerza necesaria.

No tiene la explosividad de un modelo turbo y es necesario revolucionarlo mucho para que se noten esos 165 caballos así cómo bajar de marcha para que la entrega sea más directa. Eso sí, al margen de este ‘pero’, este Mazda es un modelo prácticamente redondo.