Cuando los coches eléctricos eran todavía algo muy, muy lejano, Nissan se atrevió con el Leaf, uno de los primeros modelos eléctricos del mercado. Fue la punta de lanza del tipo de mercado en el que está derivando el sector de la automoción. Y durante mucho tiempo ha sido una de las referencias.
No obstante, estamos en épocas de cambios. Y aunque todo va enfocado a la electrificación, el Leaf también va a sufrir cambios en su próxima generación. La firma japonesa ya está trabajando en su sustituto, y este será un todocamino que se situará por debajo del Nissan Ariya. Es decir, tendremos un competidor eléctrico para el Qashqai.
Un nuevo concepto que conlleva un importante cambio de reestructuración en la firma japonesa. Este se llevará a cabo en la planta que la marca asiática tiene en Gran Bretaña. En Sunderland más concretamente.
Esta planta es la que Nissan usa para fabricar los Qashqai, Juke y Leaf, y seguirá siéndolo. Pero para desarrollar y fabricar el nuevo Leaf tendrásn que modificar buena parte de la fábrica. De ahí que hayan invertido más de 1.100 millones de euros en modificar la planta actual y en crear una nueva cercana a estas instalaciones para fabricar baterías. Este cambio, además, generará 1.650 nuevos empleos directos y otros 4.500 empleos indirectos relacionados con la cadena de montaje.
Asimismo, 490 millones de la inversión irán directamente dedicados a la fabricación del nuevo Leaf, lo que deja claro la importancia que tendrá este modelo en la estrategia de Nissan.
En cuanto a este nuevo crossover, poco o nada se sabe todavía. Solo que será completamente eléctrico, que se diferenciará notablemente del modelo saliente y que estará fabricado sobre la plataforma CMF-EV del conglomerado formado por Renault-Nissan-Mitsubishi. Su llegada debería producirse alrededor de 2024.
Y modo de aperitivo, los bocetos que acompañan este artículo y que nos dan algunas pistas sobre lo que podemos esperar. Por ejemplo, su aspecto coupé que acentúa su carácter deportivo.