El BMW i3 fue uno de los primeros modelos eléctricos premium y en sus primeros tiempos en el mercado marcó muy buenas cifras. Sin embargo, con el paso de los meses ha ido perdiendo fuelle. Las opciones eléctricas en su segmento se han multplicado con opciones más asequibles e igual o más interesantes. Y a pesar de ello, el precio del i3 sigue estando por las nubes.
El BMW i3 es un coche eléctrico de dimensiones contenidas. Mide 4.011 mm de largo, 1.598 mm de alto y 1.775 mm de ancho, dejando una distancia de batalla de 2.570 mm y un maletero 260 de litros, ampliables hasta los 1.100 l. Su aspecto es de monovolumen pequeño. Y luce un diseño vanguardista, y destaca por su calidad de acabados y sus altas prestaciones.
En el apartado mecánico está disponible en dos opciones. La primera es el 120 AH, con un motor que desarrolla 170 CV de potencia y 250 Nm de par máximo. Y con ello consigue una velocidad máxima de 150 km/b limitada electrónicamente y acelerar de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos.
Por encima tenemos el 120 AH S, con un propulsor de 184 CV de potencia y 270 Nm de par. Acelera de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 160 km/h.
En ambos casos se asocian a un sistema de tracción trasera y se alimentan de una batería de 42,2 kWh. Con ella, el modelo de acceso consigue unos 359 km de autonomía, mientras que el segundo se queda en 330 km con una sola carga.
En cuanto a su equipamiento, no existen acabados. Ambos llevan el mismo equipamiento de serie, sobre el que se ofrecen paquetes a distintos precios. Todos los modelos incluyen:
A todo ello puedes añadir paquetes como el Comfort Advanced por 1.989,99 € que suma climatizador, control de crucero con función freno o elementos de iluminación LED, el pack de asistente de aparcamiento por 990,00 € o el paquete de servicios ConnectedDrive por 681,27 €, entre otros.
Cifras que deberás sumar a los 40.700 € que cuesta acceder a la gama. Y aunque no tenga aplicadas las posibles ayudas del Plan MOVES III, es un precio bastante alto para un modelo urbano. Eléctrico, sí, pero no es un modelo con el que salir mucho de la ciudad más que para pasar ir a comer fuera o pasar un par de noches lejos de casa.