A medida que la transición hacia la movilidad eléctrica avanza, las opciones de coches híbridos aumentan, lo que hace difícil tomar una decisión cuando vamos a comprar un coche.
Los hay que siguen prefiriendo apostar por los motores térmicos de toda la vida. La fecha en la que deberán dejar de circular todavía se antoja lejana, lo que hace que muchos conductores sean reticentes a comprar un coche con algún sistema de electrificación.
Estos conductores también suelen optar por tecnologías de hibridación ligera, que permiten ahorrar en combustibles fósiles pero no obligan a renunciar a ellos. Además, no requieren que tengamos que buscar un punto de carga para alimentar la batería.
En esta línea, los modelos HEV autorecargables también son una muy buena opción. También permiten ahorrar combustible e incluso recorrer pequeñas distancias en modo totalmente eléctrico, a la vez que no precisan recargar las baterías en un punto de carga.
No obstante, también es cierto que hay conductores que no quieren esperar y que, en caso de tener que comprar un coche, solo se plantean opciones 100% eléctricas o híbridas enchufables. Y vistas las carencias en la red de puntos de carga en España, hoy por hoy se presentan como una de las mejores opciones para quienes quieren pasarse a la movilidad eléctrica.
Estos modelos mezclan lo mejor de ambos mundos. Y aunque ven reducida la capacidad de carga en el maletero y también la del depósito de combustible, obligando al conductor a repostar más a menudo, permite realizar importantes ahorros en combustible.
Mientras tanto, muchos de los que han probado distintos modelos PHEV, aseguran que Audi es una de las marcas que mejor lo está haciendo en esta parcela respecto a competidoras como Mercedes o BMW. Los modelos TFSIe son para muchos los más recomendables del segmento.
Estas versiones las encontramos en los Audi A3 y Q3, configurados con bloques compuestos de motores de gasolina 1.4 TFSI y motores eléctricos de 80 u 85 kW que se alimentan de baterías de 13,5 kWh de capacidad. Y también en las gamas de los A6, A7 y Q5, configurados con motores 2.0 TFSI, así como los A8, Q7 y Q8 con motores 3.0 TFSI. En ambos casos montan motores eléctricos de 100 ó 105 kW que se alimentan de baterías de 17,9 kWh.
Unos modelos que, según Audi, solo son una media de 2.500 euros más caros que los convencionales de la gama de Audi, y que en su mayoría permiten acceder a las ayudas del Plan MOVES III. La tormenta perfecta para que arrasen entre las marcas premium.