Recientemente te contábamos una de las decisiones que había tomado Citroën respecto a dos de sus modelos, la Berlingo y la SpaceTourer en sus versiones para particulares. Esta consistía en que a partir de este 2022 solo se podrán comprar en versiones eléctricas si el cliente es un particular, quedando reservadas las de combustión gasolina y diésel solo para profesionales.
Una decisión que repercute a los nuevos pedidos. Los que se realizaron hasta final de año seguirán vigentes. Aunque actualmente la espera para tener uno es bastante larga.
Así las cosas, a partir de ya el Citroën ë-Berlingo está disponible en los tamaños M y XL y en versiones de 5 y 7 plazas. Mientras que en el apartado mecánico montará un motor de 100 kW (136 CV) y 260 Nm de par máximo que se alimenta de una batería de 50 kWh. Con ella consigue unos 280 km de autonomía, según el ciclo WLTP. Su precio de partida es de 36.000 euros sin ayudas.
Asimismo, el Citroën ë-SpaceTourer contará con espacio para seis o nueve pasajeros. Y está disponible con niveles de batería. Una de 50 kWh que conseguirá unos 230 km de autonomía y otra de 75 kWh, con hasta 330 km de autonomía. Su precio empieza en los 54.000 euros.
Una decisión que Stellantis ha tomado para rebajar las emisiones de CO2 y esquivar las multas por exceder los límites establecidos por las instituciones gubernamentales. Y es que al sumar las marcas de FCA a las de PSA, las media de emisiones se había disparado.
Sin embargo, según apuntan varios medios, esta decisión no ha gustado en muchos concesionarios. Y es que estos temen que las ventas caigan en picado, dado el sobrecoste que supone para los clientes particulares que quieren alguno de estos modelos y la reducción de opciones que estos tendrán a la hora de acceder a una de estas furgonetas, que se postulaban como las herederas de los monovolúmenes. Un hecho que ha provocado una guerra interna en la compañía, pues provocará una reducción importante en los beneficios de las concesionarias.