Cada vez son más los conductores, y en Citroën, como en el resto de marcas, lo saben muy bien, los que tienen muy en cuenta el nivel de seguridad de un modelo u otro antes de comprarlo.
En Europa, este nivel de seguridad lo determinan las pruebas realizadas por la Euro NCAP, una agencia europea que lleva a cabo diferentes tipos de pruebas para determinar diferentes niveles de seguridad de los modelos.
Unas pruebas que en los últimos años se han endurecido mucho. Entre otras cosas porque, teniendo en cuenta que la tecnología y los asistentes en la conducción forman ya parte del día a día en los modelos nuevos, las pruebas son más exigentes.
De hecho, como bien saben en las marcas, las pruebas siempre se llevan a cabo con los paquetes de seguridad que llevan los coches de serie. De esta forma, se determina su puntuación con el modelo más sencillo de todos, dejando al margen los paquetes extra que cada consumidor puede elegir pagar o no.
Y ahí es donde muchos modelos que acaban de salir al mercado se ven perjudicados. Uno de ellos es el Citroën C4, uno de los top ventas de la marca. Un modelo que, al habr obtenido una puntuación baja en la categoría de protección a los usuarios vulnerables, su media general ha bajado y ha logrado una puntuación total de 4 estrellas sobre 5.
Una puntuación basada en las siguientes notas: ocupante adulto, 80%; ocupante infantil, 83%; usuarios vulnerables de la carretera,57; Safety Assist:, 63%. Es evidente que es te modelo puede presumir de ser un modelo muy seguro y que el hecho de que no cuente con las cinco estrellas no significa que sea un modelo no a tener en cuenta.
Todo lo contrario. Teniendo en cuenta la alta exigencia actual de estas pruebas, lograr 4 de las 5 estrellas es una muy buena señal. De hecho, modelos de referencia como el Fiat 500e, el Opel Mokka o el Renault Kangoo, entre otros, han obtenido esa misma puntuación.