Seguimos repasando cómo ha ido el mercado del motor en marzo y hoy es el turno de hablar de un modelo de Seat que no está generando todas las alegrías que esperaban en la firma con sede en Martorell. Estamos hablando del Seat León, un modelo que sigue sin levantar cabeza.
Cuando el León estrenó nueva generación a principios de 2020, Seat tenía muchas esperanzas puestas en un modelo que llegaba con importantes novedades en parcelas como la conectividad. Sin embargo, ya en su lanzamiento generó algunas críticas que le están pasando factura.
El León ha empezado el 2022 con mal pie. En enero solo matriculó 577 unidades. Y las cosas no fueron mejor en febrero, cuando registró 523 operaciones. Una cifra que le relegó hasta la posición 45 de los más vendidos.
En marzo la cosa ha ido algo mejor. Sumó 628 ventas que le situaron en la posición 33. Pero en el acumulado del primer trimestre se queda en 1.728 unidades vendidas, lo que le sitúa en el puesto 35. Y todo ello mientras modelos más innovadores como el Toyota Corolla o el Citroën C4 le pasan la mano por la cara. Ambos se cuelan en el top 10 de los más vendidos.
Los motivos pueden ser varios. Por ejemplo, que muchos consumidores lo hayan aborrecido. Y es que muchas de las opiniones que generó en el momento de su lanzamiento giraban en torno a que era un modelo muy continuista en diseño. Además, no es baladí decir que muchas de las tecnologías que parecían innovadoras en su momento, ahora las podemos encontrar en muchos otros modelos, lo que deja un tanto obsoleto al León.
Un modelo que durante años ha sido uno de los más vendidos en España, pero que está claro que no atraviesa su mejor momento. Está muy lejos de las cifras que registró en generaciones anteriores. Un problema que parece que solo solucionaría una renovación profunda. Quizás sea lo que está pidiendo a gritos.