Ya lo conocemos. Ahora solo falta que se abra el libro de pedidos, un hecho previsto para este verano, y que las primeras unidades lleguen a los concesionarios, lo que debería ocurrir a finales de verano. Hablamos del nuevo Renault Austral. Un C-SUV que llega para sustituir al Kadjar, y con el que la firma francesa quiere olvidar el fracaso que ha supuesto el modelo saliente.
Las intenciones de Renault con este nuevo Austral pasan por regresar por la puerta grande al que es uno de los segmentos más concurridos del mercado y que es clave para el devenir de la mayoría de marcas. Y es viendo los mínimos en los que se encuentra el sector, solo faltaría no tener un representante de garantías entre los más exitosos.
El Austral debe ser un modelo determinante en la estrategia de Renault a corto, medio y largo plazo. Y con él pretende plantar cara a otros súper ventas como el Kia Sportage, el Nissan Qashqai o el Peugeot 3008.
De hecho, muchos usuarios apuntan que el nuevo Austral ha tomado algunos detalles de sus competidores para lograr ese diseño atractivo que luce. Sobre todo en el interior, donde algunas opiniones giran en torno a que está muy inspirado en el 3008. Sobre todo por ese diseño de los botones de la parte inferior de la pantalla central o el del volante, que se percibe pequeño y deportivo.
Si es una copia o no queda a merced de cada opinión. Lo que está claro es que estamos ante uno de los despliegues más importante de Renault a nivel tecnológico en lo que al habitáculo se refiere. Y también a nivel mecánico, donde encontraremos versiones de gasolina son sistemas de hibridación ligera e híbridos enchufables.
Tiene buena pinta pero ya tengo mala experiencia con lo del depósito de adblue