Marcas como BMW, Mercedes y Audi pueden presumir de ser de las más vendidas a nivel mundial precisamente porque cuentan con un catálogo muy amplio de modelos. Si bien es cierto que todas y cada una de sus opciones se posicionan varios escalones por encima de las generalistas, este tipo de marcas saben muy bien que deben ofrecer diferentes tipos de productos para seguir creciendo.
Este sentido, lo más habitual, y como bien podemos ver en el catálogo de BMW, es que los fabricantes alemanes opten por tener modelos sencillos dentro de su gama que, por mucho que sean más caros que los generalistas, van destinados a la gran mayoría de los conductores en los diferentes mercados.
Eso sí, también este tipo de fabricantes optan por poner en el mercado en modelos muy exclusivos, modelos para aquellos conductores que no tienen el presupuesto su principal argumento de venta y que lo que buscan es precisamente contar con un coche con lo último en tecnología, prestaciones de coche de lujo y un diseño y un equipamiento que lo equiparen a opciones incluso de marcas superiores.
Un buen ejemplo de ello es el BMW Serie 7, un modelo que siempre se ha caracterizado por ser el buque insignia es lo que se refiere al lujo de la marca alemana y que, ahora que ha estrenado una nueva generación, puede presumir de seguir siéndolo.
Tan solo hace falta ver las imágenes de este modelo para darse cuenta de que estamos ante un modelo no tan solo premium, sino de lujo, comparable incluso a opciones tan bien valoradas como un Rolls Royce por los acabados, tecnologías y diseño.
Eso sí, como es lógico, uno de los modelos mejor dotados de BMW no es que pueda presumir de ser precisamente barato. Tal y como podemos ver en quecochemecompro.com, el precio de partida de este modelo roza casi los 120.000 €, un precio que lo deja casi fuera del mercado, al menos en nuestro país. No es casualidad entonces que, pese a ser uno de los mejores BMW actualmente en el catálogo de la marca alemana, no pueda presumir precisamente de ser de los más vendidos.
Dan muchos problemas con el maldito check engine