La pandemia del coronavirus ha tenido un impacto directo en la industria del automóvil durante los últimos dos años, con una escasez de microchips y semiconductores que ha retrasado los plazos de entrega y ha reducido drásticamente las matriculaciones. Además, la inflación de los últimos meses ha provocado un aumento en los precios de los vehículos, lo que los ha convertido en un producto de lujo.
Ahora el sector se enfrenta a otro problema: el aumento del precio de la gasolina y el diésel, lo que afecta directamente a los coches de combustión, que siguen siendo los más vendidos. Los precios se han disparado en los últimos tiempos. Sin embargo, el precio del petróleo está cayendo. ¿Por qué no repercute en el precio de los combustibles?
Muchos no entienden que el precio del barril de petróleo haya bajado en los últimos meses, con una disminución de más del 30% en comparación con el precio que tenía en marzo de 2022, cuando comenzó la guerra en Ucrania, pero que los precios de la gasolina y el diésel no lo hayan hecho.
¿Por qué el precio de la gasolina y el diésel no ha bajado al mismo ritmo que el precio del petróleo? La respuesta es que hay varios factores que explican esta situación. Uno de ellos es que el precio del barril Brent se fija en dólares, lo que significa que la fortaleza del dólar ayuda a regular los precios.
Otro factor que influye en el precio de la gasolina y el diésel es que estos productos refinados tienen su propia cotización en el mercado, lo que hace que sea difícil que la cotización suba y baje con la misma intensidad que el precio del barril de petróleo. Además, los impuestos representan el 50% de lo que pagamos en la gasolinera, lo que también influye en el precio final.
Por otro lado, los márgenes de las empresas también afectan al precio de la gasolina y el diésel. Tanto las empresas de transporte como las gasolineras tienen sus propios costes, que deben ser cubiertos por el precio que cobran por el combustible. Por lo tanto, el precio que pagamos en la gasolinera no solo se debe al precio del petróleo, sino que también depende de otros factores que influyen en el mercado.