La DGT ha decidido poner fin a la obligatoriedad que hasta ahora tenían los conductores de colocar los famosos triángulos cuando el vehículo sufría un percance en autovía o autopista. La Dirección General de Tráfico pretende así reducir notoriamente el número de muerte – por atropello – consecuencia de bajarse del automóvil para colocar estos elementos de seguridad. La nueva norma entrará en vigor en las carreteras españoles a partir de este mismo verano.
Tras conocer que en 2022 se produjeron 1.746 muertes por accidentes de tráfico, siendo 1.270 de ellas en carretera, la DGT quiere reducir sensiblemente esas cifras. Cabe destacar también que 42 personas perdieron la vida el año pasado por atropellos como consecuencia de caminar por autovías y autopistas. Y aunque es imposible de contrastar, la DGT tiene claro que gran parte de ellas podrían haberse producido por bajarse del automóvil para colocar los triángulos. En otras palabras, con el cambio de normativa, la Dirección General de Tráfico quiere acabar con esas cifras, o al menos reducirlas en sobremanera.
“En el Reino Unido y Luxemburgo ya no es obligatorio poner los triángulos en vías rápidas, porque consideran que es más peligroso bajar del coche a colocar el triángulo a 50 metros que no colocar nada. Y aquí estamos viendo si para este verano podemos hacer lo mismo en autopista”, ha señalado Pere Navarro, director de la DGT. Por tanto, y aunque no hay nada oficial por el momento, esta nueva medida podría entrar en vigor ya de cara al verano, cuando se producen millones de desplazamientos en las carreteras españolas.
La DGT debe dar ahora con la clave jurídica para poder llevar a cabo este cambio de normativa. Hasta entonces, seguirá la obligatoriedad de colocar los triángulos o, en su defecto, la señal V16. Cabe recordar que, aunque no sea obligatoria ponerla hasta enero de 2026, sigue siendo a día de hoy la única manera de cumplir con la obligatoriedad de señalar a los demás conductores el percance, y hacerlo sin tener que salir del automóvil.