Uno de los grandes objetivos que tiene la Dirección General de Tráfico, la DGT, es ir poco a poco mejorando la seguridad vial en nuestras carreteras y, sobre todo, reduciendo la mortalidad en nuestro país en que se refiere a accidentes de coche.
Este sentido, han sido varias las medidas que se han puesto en marcha los últimos años que han ayudado mucho a ir poco a poco reduciendo esta mortalidad, sobre todo el hecho de aplicar la velocidad máxima en nuestro país de 120 km/h.
Eso sí, en este organismo somos conscientes de que, por mucho que la velocidad máxima esté fijada, son muchos los conductores que optan por no obedecer esa saltar están los motiva, de ahí que lleven muchos años sin cantando radares en infinidad de puntos estratégicos a largo de nuestra geografía.
Respecto a cuál es el radar que más multas ha logrado en este último año a lo largo de toda la geografía española se encuentra en Tarragona, Cataluña. Concretamente se encuentra en el kilómetro 325 de la AP-7, entre Ulldecona y Amposta.
Este radar cazó en el pasado año a ni más ni menos que 67.582 conductores superando la velocidad permitida, lo que supone una media de ni más ni menos que 185 infracciones al día, una muestra inequívoca de que, por mucho que la inmensa mayoría de los conductores que nuestro país hayan decidido respetar las normativas y la velocidad máxima, siguen siendo muchos los que optan por no hacerlo.
Resulta curioso también que el segundo radar con más multas en España se encuentra también en Cataluña, en este caso en la provincia de Girona, en el kilómetro 312 de la C-31, con una cifra cercana a las 57.000 multas.
Saben en la DGT que la apuesta por los radares puesto que está yendo más en los últimos tiempos y que están mejorando con padres cada vez más efectivos, se ha convertido en una de sus mejores armas para intentar ir poco a poco reduciendo el número de accidentes en España.