El Mazda CX-60 ha sido uno de los últimos miembros en sumarse a la familia japonesa. Un SUV que ha llegado para arrasar entre quienes quieren un todocamino de grandes dimensiones con calidad premium sin tener que gastar los 60, 70 u 80 mil euros que suelen costar modelos de su tamaño en Mercedes, Audi o BMW.
Lo primero que tenemos que destacar es su tamaño, es el SUV más grande de la marca nipona. Con sus 4.745 mm de largo, 1.680 mm de alto y 1.890 mm de ancho, espacio es lo que no te va a faltar. Y ojo al maletero, tiene unos generosos 570 litros, ¡que se amplían a unos increíbles 1.726 litros.
Un modelo de cuya gama muchos consideran que la mejor versión es la híbrida enchufable. Mezcla lo mejor de los dos mundos y permite obtener un consumo muy contenido. Y que, además, tiene un precio muy razonable para todo lo que ofrece. Gracias al Plan MOVES III y a las promos de Mazda, según quecochemecompro.com, es la versión más barata de la gama. Mientras las variantes MHEV arrancan en 47.298 €, la PHEV puede ser tuya desde 46.244 euros.
La variante enchufable tiene un bloque que combina un motor de gasolina de 2.5 litros Skyactiv-G y uno eléctrico que, juntos, entregan 327 CV y 500 Nm de par. Además, cuenta con un cambio automático de ocho marchas y una tracción total inteligente. El motor eléctrico se alimenta de una batería de iones de litio de 17,8 kWh con la que puede recorrer hasta 63 km en modo 100% eléctrico.
Las prestaciones no dejan indiferente a nadie. Alcanza una velocidad máxima de 200 km/h y hace el 0 a 100 km/h en 5,8 segundos. Y registra un consumo medio de 1,5 litros cada 100 km con la batería cargada. Tiene la etiqueta CERO de la DGT.
Y eso no es todo, amigos. Los acabados son de lo más top. La versión más económica incluye el acabado Prime-Line. Y este cuenta de serie con: