Sabemos que la movilidad eléctrica es el futuro, pero hasta ahora, hemos tenido que lidiar con algunas trabas en el camino. Los precios son elevados, las autonomías dejan mucho que desear y los tiempos de carga son eternos.
Las normativas anticontaminación están apretando a las marcas, y la Unión Europea está apurando el paso en la transición hacia la movilidad eléctrica. Pero lo cierto es que no todo avanza tan rápido como quisiéramos. Los coches eléctricos tienen que volverse más asequibles, las autonomías tienen que mejorar y los tiempos de carga deben ser más rápidos. Eso es lo que necesitamos para convencer a más personas de hacer el cambio.
Hablemos del precio. Por ahora, los coches eléctricos tienden a ser un poco caros, y eso aleja a muchos conductores. Las maravillas de Tesla son geniales, pero no todos pueden permitirse uno de esos. Además, las autonomías de la mayoría de los modelos son un tanto decepcionantes. Solo los coches eléctricos premium parecen estar a la altura, pero no todos pueden pagarlos. Y luego están los tiempos de carga. Si pudiéramos cargar más rápido, el problema de las autonomías no sería tan grave.
Sin embargo, muchos fabricantes trabajan en mejorar todos estos aspectos. Y Li Auto demuestra que hacerlo es posible. Esta marca china ha logrado un hito impresionante con su modelo MEGA. Este monovolumen ha logrado cargar su batería del 10 al 80% en tan solo 11 minutos. Lo hizo racias a un pico de carga máxima de 521 kW, convirtiéndolo en el coche eléctrico más rápido del mundo en ese sentido.
El Li Auto Mega, en esos 11 minutos, recupera unos 77,3 kWh de energía, llevándolo al 80% de carga. Y no es todo, este monovolumen tiene una batería QiLin de CATL, que es capaz de recuperar hasta 500 kilómetros de autonomía en tan solo 12 minutos.
Asimismo, gracias a esa famosa batería QiLin de CATL, este enorme monovolumen de más de 5 metros presume de tener más de 1.000 km de autonomía. En todo caso, por ahora esto es un proyecto en pruebas con un modelo, un cargador y una batería específicos. Pero está claro que estamos más cerca que nunca de cargar nuestro coche eléctrico en menos tiempo de lo que pasamos esperando en una gasolinera.