En Nissan tienen muy claro que, por mucho que los motores de combustión sigan siendo las mecánicas que más alegrías les dan a nivel de ventas, los motores eléctricos son el futuro, de ahí que cada vez apuesten más por ellos.
Modelos como el Leaf o el recientemente estrenado Ariya evidencian que Nissan, como ocurre en tantos otros fabricantes, no se quieren quedar a la cola en cuanto a los eléctricos.
Eso sí, cabe tener en cuenta que la marca japonesa, por mucho que busque con sus eléctricos modelos muy eficientes en cuanto a la autonomía y a la eficiencia energética, no se olvida de aquellos conductores que siempre habían visto a la marca como sinónimo de un fabricante de coches interesantes y deportivos.
Y es que Nissan ha tenido a lo largo de su historia algunos de los deportivos más interesantes con motores de combustión, y eso es lo que quiere hacer en el futuro también con los eléctricos.
Es por eso que, sin poner fechas ni poner encima de la mesa un modelo concreto, en la marca japonesa sí que han dejado muy claro que sus planes asan por volver a conectar con los jóvenes (un target cada vez menos interesado en los coches) a través de un eléctrico con espíritu de deportivo y dimensiones compactas.
Es cierto que en ningún caso es una tarea sencilla, entre otras cosas porque los eléctricos son y van a seguir siendo coches muy caros de fabricar, pero en Nissan tiene experiencia de sobra a la hora de poner en el mercado modelos que atraigan a un público que no está centrado tan sólo en la eficiencia y la comodidad, sino en, sobre todo, disfrutar el volante con un coche divertido y deportivo.