El modelo más caro de BMW cuesta 227.150 euros en la versión de acceso 

No es que sea precisamente ningún secreto que BMW, siendo como es una de las marcas premium mejor valoradas y más exitosas a nivel mundial, sea precisamente una marca dirigida a la inmensa mayoría de conductores.

Y es que, como ocurre en los catálogos de otras marcas premium como es el caso de Mercedes, Audi, Volvo o Lexus, sus precios son muy elevados, incluso para los modelos más sencillos. Tal y como podemos comprobar en el configuradores de la marca de Múnich, el modelo más barato que tiene actualmente a la venta BMW en nuestro país es el Serie 1 en su versión de acceso, un modelo que supera ya los 30.000 € como precio de partida.

Otra de las características que tienen este tipo de marcas es que, como podemos comprobar el configurado, la oferta a nivel de diferentes modelos con diferentes opciones mecánicas y diferentes carrocerías es enorme. En el caso de BMW, son ni más ni menos que 101 modelos los que tiene la venta contando con las diferentes carrocerías y mecánicas dentro de cada uno de sus modelos.

El BMW M8 Competition Cabrio, el más caro de BMW

Lo curioso en este caso es que, a diferencia de lo que ocurre con muchas marcas, en las que los eléctricos son los modelos más caros, en el caso de BMW es un modelo que cuenta con un motor de combustión tradicional, aunque en este caso es un motor de gasolina de ni más ni menos que 625 caballos de potencia.

Esa es la mecánica que monta el BMW M8 en su versión Competition Cabrio, una versión que cuenta con lo último en tecnología de la marca y con una especificación en cuanto a dinámicas de conducción perfecta para aquellos que buscan la máxima deportividad y el lujo dentro de la marca alemana.

Eso sí, su precio de partida es de él y más ni menos que 227.150 €, precio que puede elevarse hasta más de 234.000 € si contamos con todos los extras disponibles, lo que lo convierte no tan solo en el modelo más caro de BMW actualmente en nuestro país sino también en un modelo dirigido a un escasísimo el número de conductores que se pueden permitir gastarse este tipo de cifras en un coche.