Tanto la gasolina como el diésel alcanzaban sus precios más bajos en España a finales de 2023, pero con la llegada de 2024, el precio vuelve a estar otra vez al alza. Y aunque los costes están lejos de los picos más altos, llenar el depósito sigue implicando un gasto considerable. Si eres de quienes quieren ahorrar en gasolina o diésel, lo que te contamos te interesa. Cualquier ámbito es bueno para recortar en gastos, y repostar combustible es uno de ellos. Además, estos trucos te permitirán perjudicar menos el medioambiente.
Lo primero que se debe hacer si se quiere ahorrar carburante es conducir de una manera totalmente eficiente para evitar un consumo innecesario de diésel o gasolina. Si se excede el límite de velocidad, se frena de manera muy brusca o se hacen maniobras muy exageradas, se gastará más combustible del necesario.
En este sentido, es importante conducir atento a los agentes externos y, en la medida de lo posible, anticiparse a lo que nos encontraremos unos metros más adelante. Ello nos permitirá no realizar tantos acelerones y frenazos.
El otro truco eficiente para ahorrar combustible tiene que ver con las bajas temperaturas que han llegado con la cuesta de enero. La calefacción se convierte en uno de los elementos más usados del coche en estos meses invernales. Debido al frío, los conductores tienden a encender la calefacción con una temperatura muy alta y la potencia a tope para calentar el coche lo más rápido posible. Sin embargo, eso es muy perjudicial si se quiere ahorrar combustible, ya que el motor también deberá entregar más energía al sistema de climatización.
Asimismo, también influye la dirección en la que sitúas las rejillas de la ventilación. Teniendo en cuenta que el aire caliente pesa menos y tiene a subir hacia arriba, lo mejor es colocar las rejillas mirando hacia abajo o configurar el coche para que solo salga aire por las salidas bajas.
Estos dos simples pero efectivos trucos pueden marcar la diferencia en tu gasto mensual en combustible. Conducir de manera eficiente y ser consciente de cómo utilizas la calefacción en tu coche no solo beneficia a tu bolsillo, sino también al medio ambiente. La conducción eficiente no solo reduce los costos de gasolina o diésel, sino que también disminuye las emisiones de gases contaminantes.