La Dirección General de Tráfico (DGT) y el gobierno han revelado las alarmantes estadísticas de siniestralidad del año pasado, donde fallecieron 299 motoristas, un 9% más que en el año anterior. Este aumento en los accidentes mortales ha llevado a cambios significativos en la normativa que regula el sector motorista, con el objetivo de abordar esta preocupante tendencia.
Entre las medidas anunciadas, dos destacan especialmente: la prohibición de los cascos de tipo abierto y la obligatoriedad de utilizar guantes homologados. La DGT considera que los cascos abiertos, como los de tipo jet, no ofrecen la misma seguridad que los cascos integrales y modulares, por lo que a partir de 2024 solo estos últimos serán aprobados legalmente para circular.
Los cascos modulares, que cuentan con una mentonera abatible que permite convertirse de integral a abierto, serán los elegidos como la única opción permitida. Esta medida busca garantizar una mayor protección para los motoristas en caso de accidente, reduciendo así el riesgo de lesiones graves en la cabeza.
En cuanto a los guantes, la nueva normativa establece su uso obligatorio y exige que cuenten con homologación europea, al igual que los cascos. Anteriormente, circular sin guantes no estaba sancionado, pero ahora será una infracción, y adquirir guantes no homologados podría acarrear problemas legales.
El Ministerio del Interior ha adelantado que se espera que estas medidas entren en vigor a lo largo de 2024. Sin embargo, su implementación no será inmediata, ya que requiere modificar el Reglamento General de Conductores, un proceso que llevará tiempo y que podría retrasar la puesta en marcha hasta algún momento entre el verano y fin de año.
Estas nuevas regulaciones buscan mejorar la seguridad de los motoristas en las carreteras españolas y reducir la incidencia de accidentes graves. Se espera que, una vez en vigor, contribuyan a proteger la vida y la integridad física de quienes conducen motocicletas, fomentando una conducción más segura y responsable.