Mercedes adopta un enfoque más realista hacia los coches eléctricos, reconociendo los desafíos actuales del mercado y adaptando su estrategia para enfrentarlos. Aunque continúa invirtiendo en tecnología eléctrica, no lo hará a tumba abierta, mientras sigue apostando fuerte por las opciones de combustión en su cartera de productos, a la espera de ver cómo evoluciona el mercado.
El anuncio de varias marcas de su intención de abandonar la combustión y optar exclusivamente por coches eléctricos después de mediados de la década ha generado un debate sobre la viabilidad a largo plazo de esta decisión, especialmente ante la incertidumbre de las políticas de la Unión Europea para 2035.
Mercedes, siguiendo la línea de Volkswagen, confirmó que continuará vendiendo modelos de combustión hasta el último día de 2034, dependiendo de las regulaciones europeas. Esta decisión se debe a la percepción de que el año pasado no fue favorable para los coches eléctricos y que las ventas futuras tampoco se prevén muy alentadoras.
Las expectativas sobre los modelos eléctricos eran altas, especialmente en el segmento de lujo como el de Mercedes. Pero los clientes aún muestran preferencia por los modelos de combustión debido a preocupaciones sobre la autonomía de las baterías, la vida útil de estas y el tiempo que requieren para cargar. Además, está por ver cómo evoluciona la tecnología, pues los coches eléctricos actuales presentan algunos problemas a largo plazo. Sin ir más lejos, no hay tanto litio en el planeta para abastecer lo que se viene. Y todo ello ha llevado a la marca a repensar su estrategia y prepararse para tiempos difíciles en el mercado de los vehículos eléctricos.
A pesar de trabajar en la adaptación de sus motores a la normativa Euro 7, Mercedes reconoce que el debate sobre los coches eléctricos a partir de 2035 se intensificará en dos años. La infraestructura de carga y la reducción de las ayudas a la compra son factores clave que influyen en esta decisión.
El CEO de Mercedes resalta las ventajas de las plataformas avanzadas de la marca, que permiten la producción de modelos con motores eficientes, híbridos enchufables y eléctricos en una misma línea de producción. Sin embargo, la estrategia futura inmediata se centrará en el desarrollo de modelos eléctricos más asequibles y deportivos, que se espera estén disponibles a partir de 2026.