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Mercedes sigue los pasos de otras premium y rectifica en su estrategia

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Mercedes-Benz, una marca emblemática en el mundo del lujo y la innovación tecnológica, enfrenta un momento de redefinición en la era de la electrificación. Conocida por su sofisticación y comodidad, la marca alemana se ve desafiada por la rápida evolución del mercado automotriz, donde la electrificación avanza a un ritmo que obliga a reconsiderar estrategias establecidas.

Aunque Mercedes ha sido un referente en la industria, la transición hacia los vehículos eléctricos (EVs) ha resultado más complicada de lo previsto. A pesar de su liderazgo en tecnología y su sólido legado, la compañía ha encontrado obstáculos inesperados en su camino hacia un futuro completamente eléctrico.

Mercedes rectifica en su estrategia para seguir apostando por motores térmicos

Inicialmente, Mercedes había anunciado un ambicioso plan para ser una marca totalmente eléctrica para 2030. Sin embargo, la realidad del mercado ha obligado a la marca a revisar sus objetivos. Ahora, la meta es que el 50% de sus ventas sean EVs para esa fecha, lo que refleja una necesidad de ajustar el rumbo en respuesta a las dificultades encontradas.

Mercedes EQE SUV

Un desafío importante para Mercedes ha sido su desempeño en el mercado chino, donde los vehículos eléctricos tienen una fuerte presencia. Modelos como el EQS, la versión eléctrica de la lujosa Clase S, no han alcanzado el éxito esperado en ventas. Con una reducción significativa en la cuota de mercado de los eléctricos en 2024, la marca se enfrenta a una realidad que pone en cuestión su estrategia inicial.

Problemas con algunos modelos de combustión interna

Pero el problema no se limita solo a los eléctricos. La versión de combustión interna de la Clase S también ha visto una disminución en sus ventas, lo que sugiere que Mercedes está enfrentando un reto más amplio en cuanto a la aceptación de sus productos, tanto eléctricos como tradicionales.

Aunque estos resultados son preocupantes, Mercedes tiene la capacidad de adaptarse y redirigir su enfoque. La marca cuenta con los recursos y la experiencia necesarios para ajustar su estrategia y seguir siendo competitiva en un mercado que cambia rápidamente.

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