La Dirección General de Tráfico (DGT) se prepara para implementar un conjunto de cambios significativos en el proceso de renovación del carnet de conducir a partir de 2025. Estas modificaciones buscan reforzar la seguridad en las carreteras. Afectarán a todos los conductores en España. Y traerán consigo nuevos requisitos que deberán cumplir para poder mantener su permiso en regla.
A partir del 1 de enero de 2025, uno de los cambios más destacados será la obligatoriedad de presentar un historial médico al renovar el carnet. La DGT ha identificado una lista de enfermedades que podrían influir en la capacidad de un conductor para manejar un vehículo de manera segura. Si un conductor sufre alguna de estas condiciones, el permiso podría no ser renovado, o incluso ser suspendido temporalmente.
El nuevo protocolo incluirá un enfoque más riguroso en la evaluación de la salud de los conductores. Las enfermedades que estarán bajo revisión se dividen en nueve categorías: vasculares, cardíacas, psiquiátricas, neurológicas, endocrinas, digestivas, respiratorias, oncológicas y crónicas o degenerativas. Dependiendo de la naturaleza y gravedad de la enfermedad, la DGT tomará la decisión de renovar, suspender o denegar el carnet de conducir.
Este cambio se suma a la normativa actual, que ya exige renovar el carnet de conducir cada diez años para personas menores de 65 años y cada cinco años para aquellos que superan esa edad. Sin embargo, las nuevas condiciones añaden un nivel adicional de control. Ahora se evaluará de manera más exhaustiva si los conductores continúan siendo aptos para la conducción.
La razón detrás de estas medidas es clara: mejorar la seguridad vial en un contexto en el que las condiciones de salud pueden cambiar rápidamente, afectando la capacidad de conducción. La DGT quiere asegurarse de que solo aquellas personas que estén en condiciones óptimas puedan seguir circulando por las carreteras.