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Clásicos y últimos modelos de Bentley se van de fiesta en California

Marco Antonio Martín

La exhibición anual de Bentley en la Monterrey Car Week ha reunido un trío de novedades que combinaron el automóvil clásico con las últimas creaciones de la marca.

El nuevo Continental GT Speed ​​de cuarta generación se presentó en California con un ejemplar personalizado de la división de carrocería y fabricación a medida de Bentley, Mulliner, encabezando una flota de más de 30 ejemplares de automóviles de preproducción.

Además, tras una restauración de dos años, el S2 Drophead Coupe de 1961 de Bentley (uno de los quince ejemplares creados por Mulliner en la década de 1960) se convirtió en el primer Bentley que participó en el Pebble Beach Concours d'Elegance.

El S2 Drophead Coupe es un antecesor del nuevo Continental GT Speed ​​Convertible. La nueva familia Continental GT Speed ​​utiliza el nuevo sistema de propulsión híbrido de alto rendimiento de Bentley, creado en torno a un nuevo motor V8 acoplado a un motor eléctrico, convirtiéndose en el siguiente miembro de una línea de V8 de Bentley que comenzó con el S2, que introdujo un V8 de 6,23 litros para reemplazar el motor de seis cilindros en línea del S1.

El último proyecto de la división Classic de Mulliner, la Speed ​​Six Continuation Series, también se utilizó en la carretera por primera vez. Una copia exacta del Speed ​​Six que ganó las 24 Horas de Le Mans en 1930, el Speed ​​Six "Car Zero" es un ejemplar de nueva construcción elaborado a mano según los dibujos originales, los materiales y utilizando técnicas de fabricación originales. El automóvil ha sido conducido por varios miles de millas durante el desarrollo de ingeniería y la aprobación, antes del viaje a Monterrey para ofrecer una auténtica experiencia Speed ​​Six a los clientes de Mulliner que han pedido uno de los 12 ejemplares que se crearán.

El Bentley S2, que sucedió al S-Type de primera generación, fue aclamado como uno de los sedanes más lujosos e innovadores del mundo en su lanzamiento en 1959. Sobre esta plataforma, Mulliner creó la versión más rara: el S2 Drophead Coupe, del que solo se construyeron 15 ejemplares.

La presencia de Bentley en la Monterrey Car Week  reunió casi 90 Bentleys en la península durante la semana, y más de 3.000 clientes y amigos fueron recibidos por Bentley en diferentes eventos y veladas.

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