Para los amantes de los todoterrenos, el Land Rover Defender ha sido una referencia indiscutible en la industria automovilística durante décadas. Este modelo icónico, que ha evolucionado desde sus inicios en los años 80, sigue siendo un símbolo de robustez y aventura. Sin embargo, con el paso del tiempo, el Defender ha adoptado diseños y tecnologías más modernas, alejándose un poco de su esencia clásica.
Consciente de la nostalgia que despiertan las versiones antiguas, Land Rover ha tomado una decisión inusual pero emocionante: resucitar el Defender clásico con una versión modernizada que conserva su diseño original. Esta nueva edición, conocida como Classic Defender V8, combina la estética retro con mejoras mecánicas y de confort adaptadas al mercado actual.
Disponible en dos versiones, 90 y 110, con carrocerías de tres y cinco puertas respectivamente, el Classic Defender V8 es un auténtico capricho para los entusiastas del modelo. Los interiores han sido actualizados con asientos deportivos Recaro, materiales de alta calidad, y un moderno selector de marchas para el cambio automático. A nivel exterior, los faros LED respetan el diseño original, mientras que las suspensiones reforzadas y los frenos de alto rendimiento garantizan una experiencia de conducción a la altura de las expectativas.
La joya de esta versión es su motor V8 de 5.0 litros, que ofrece 405 CV de potencia y un par máximo de 515 Nm, asociado a una transmisión automática de ocho velocidades. Esta combinación permite que el Classic Defender mantenga su espíritu aventurero, pero con el rendimiento y la fiabilidad de un vehículo moderno.
Sin embargo, este regreso al pasado tiene un costo elevado. Los precios comienzan en 225.740 euros para la versión más sencilla y alcanzan los 250.000 euros para las variantes de mayor tamaño y capacidad. Así, el Classic Defender V8 se posiciona como un lujo accesible solo para los más adinerados, pero también como una pieza de colección que rinde homenaje a la rica historia de Land Rover.