El Ministerio del Interior sigue en su búsqueda por hacer todo lo que esté en su mano para rebajar los accidentes por el alcohol en las carreteras españolas. Por eso, la cartera que dirige Fernando Grande-Marlaska ha decidido dar un paso más en lo que respecta al límite permitido de alcohol en sangre. Por ello, planean descender de los 0,5 gramos por litro, que es el tope actual, hasta los 0,2 gramos.
Una medida que se incluiría en una reforma del reglamento general de circulación para la protección de usuarios vulnerables. Para que se pueda llevar a cabo debe ser aprobada por el Congreso de los Diputados. Fuentes del propio Ministerio habrían señalado que desean llevar la propuesta tan pronto como sea posible.
Esta modificación implicaría un cambio en el decreto del artículo 20 del Reglamento de Circulación. El apartado en el que se expone el límite máximo de alcohol en sangre permitido en estos momentos. El propio ministro quiso remarcar la importancia de estas reformas recordando que "más de la mitad" de los accidentes en carreteras están presentes el alcohol y las drogas. A su vez, expresaba que "la sociedad española está madura para abordar este tema". Por ello, quiso afirmar en un desayuno informativo que "lo estamos trabajando seriamente".
Cabe destacar que esta medida la quieren implementar tanto para los conductores profesionales, noveles y el resto. Lo que llevaría a equipararse a otros países como Polonia, Suecia y Estonia. Sin embargo, hay otros países de la Unión Europea que son tajantes y no permiten ningún nivel de alcohol al volante. Se tratan Eslovaquia, Hungría, República Checa y Rumanía. En el caso de los noveles, la tasa del 0,0 reside también en Alemania, Croacia o Italia.
Volviendo a nuestro país, esta medida podría considerarse una continuación de la campaña de concienciación que promovió Tráfico durante el verano. "A la carretera no le importa lo que has bebido" porque "solo cero tiene cero consecuencias" fue la frase del eslogan que se pudo ver. Por otro lado, también se quiere aumentar el número de controles de alcohol y drogas. Se pretende llegar a los seis millones de controles de alcoholemia en las carreteras y 120.000 de drogas.