La histórica marca española Ebro ha regresado al mercado con fuerza y ya ha anunciado las fechas de salida de sus dos primeros SUV, los Ebro S700 y Ebro S800. Con un fuerte apoyo industrial y una sólida estrategia de mercado, Ebro se prepara para hacer frente a grandes competidores en 2025, en lo que promete ser una de las vueltas más esperadas de la automoción en España.
Estos vehículos marcarán el renacimiento de la compañía, que en su apuesta por la innovación ha decidido entrar de lleno en el competido mercado de los todocaminos. Ambos modelos se producirán en España, en la planta de la Zona Franca de Barcelona, reforzando el sello de calidad "Made in Spain".
La producción en serie de los S700 y S800 comenzará en noviembre de 2024, una vez que se complete la homologación definitiva de ambos vehículos. Ebro espera que esta nueva etapa impulse la economía local, ya que se prevé la contratación de hasta 300 trabajadores a medida que se incorporen nuevos turnos de producción a lo largo de 2025. En su primer año, la marca planea fabricar alrededor de 15.000 unidades, consolidando su presencia en el mercado español.
El Ebro S700 competirá en el segmento C-SUV, mientras que el S800 lo hará en el segmento D-SUV, siendo este último un modelo de mayor tamaño. Ambos vehículos utilizarán una plataforma desarrollada en colaboración con el gigante chino Chery, lo que permitirá a Ebro ofrecer tecnología avanzada a precios competitivos. Además, se ofrecerán versiones con motores de gasolina y híbridos enchufables (PHEV), lo que amplía las opciones para los consumidores.
A nivel comercial, Ebro ha cerrado acuerdos con 30 concesionarios que cubrirán toda la geografía española, asegurando no solo la venta, sino también un servicio postventa adecuado para sus clientes. Aunque los precios de los S700 y S800 aún no se han revelado, se espera que sean asequibles, lo que podría convertir a estos modelos en líderes de sus respectivas categorías.