Mazda se ha convertido en una marca pionera en la industria automotriz. No solo por su diseño atractivo y distintivo, sino también por su enfoque innovador en tecnologías de combustión interna. Mientras muchos fabricantes abandonan los motores de combustión en favor de la electrificación total, Mazda sigue apostando por mejorar y optimizar esta tecnología, adaptándola a las nuevas y exigentes regulaciones ambientales. Su último avance, el sistema SKYACTIV-Z, es el más ambicioso hasta la fecha. Busca mantener viva la combustión en un mundo donde la electrificación parece inevitable.
El SKYACTIV-Z representa un cambio revolucionario en los motores de Mazda. A diferencia de otros sistemas, esta tecnología utiliza una técnica de combustión avanzada llamada lambda one. Esta permite una combustión altamente eficiente al equilibrar la proporción de aire y combustible en cada ciclo. Este enfoque mejora considerablemente la eficiencia térmica y reduce las emisiones contaminantes, sin sacrificar la potencia y el rendimiento. Mazda asegura que este sistema es capaz de funcionar eficientemente en un rango amplio de revoluciones, algo que muy pocas marcas han logrado.
El nuevo SKYACTIV-Z debutará en el mercado en 2027. Lo hará primero en motores de cuatro cilindros, con planes de extenderlo a motores de seis cilindros en el futuro. Mazda ha desarrollado esta tecnología en colaboración con otras grandes marcas como Toyota y Subaru, pero sigue destacando como el líder en este campo gracias a su experiencia con motores rotativos y sus innovaciones constantes.
Este enfoque de Mazda en motores de combustión avanzados le permite competir no solo con los estándares europeos y norteamericanos más estrictos, sino también con marcas de lujo como Mercedes, especialmente en términos de eficiencia y sostenibilidad. Además, el lanzamiento del EZ-6 como el primer vehículo eléctrico de la marca también indica que Mazda no abandona el futuro eléctrico, sino que mantiene su compromiso con un equilibrio entre combustión y electrificación.