Umtiti sufre una conmoción cerebral: un traumatismo cada vez más frecuente en el fútbol

Este martes, durante el partido entre Lille y Reims, Samuel Umtiti tuvo que abandonar el partido tras darse darse un golpe en la cabeza. Ante una posible conmoción cerebral y al presentar un hematoma, el exfutbolista del Barcelona fue hospitalizado.

La conmoción cerebral, entendida como un tipo de lesión cerebral traumática que afecta a la función normal del cerebro, es algo muy frecuente en el deporte, sobre todo en fútbol, rugby y hockey, que ocurre como resultado de un golpe en la cabeza o en el cuerpo.

Aunque a priori, tal y como apunta el "Protocolo para la evaluación y el manejo de las conmociones cerebrales asociadas al deporte" de la Sociedad Neurológica Argentina, una única conmoción cerebral no debe causar daños permanente, una segunda conmoción poco después de esta, aunque no sea muy fuerte, sí que puede producir efectos "permanentes, incapacitantes o mortales".

Síntomas y signos asociados a una conmoción cerebral

Este protocolo identifica una serie de síntomas y signos físicos, emocionales y cognitivos asociados a una conmoción cerebral. Si el deportista muestra una o más de estos síntomas tras un golpe se debe plantear la posibilidad de que el jugador hay sufrido este tipo de traumatismo.

• Físicos: Cefalea, cervicalgia, náuseas, vómitos, problemas de equilibrio, vértigo, trastornos visuales, fatiga, fotofobia, sonofobia y/o adormecimiento de una parte del cuerpo.
• Cognitivos: sensación de embotamiento o aturdimiento, dificultad para concentrarse y problemas de memoria, respuesta lenta a preguntas y/o repetición de preguntas.
• Emocionales: irritabilidad, tristeza, labilidad emocional y/o nerviosismo.
• Sueño: Tendencia al sueño, dormir más o menos de lo habitual y/o dificultad para conciliar el sueño.

Volver al juego demasiado pronto puede tener complicaciones

Llama la atención que los jugadores que sufren una conmoción cerebral vuelven  en pocas días al terreno de juego. Según la Sociedad Neurológica Argentina, en la mayoría de los casos, estos se recuperan sin problemas en un periodo de 12 días.

Sin embargo, tras la vuelta al juego de diferentes casos se han reportado una serie de complicaciones:

• Menor rendimiento deportivo.
• Mayor riesgo de lesiones al volver al juego.
• Síndrome del segundo impacto.
• Depresión y otros problemas de salud mental.
• Deterioro cognitivo progresivo.

Aunque no están claros los factores de riesgo de complicaciones después de una conmoción cerebral en el deporte, el factor genético puede tener un papel importante.

Sin embargo, el consenso actual se inclina más a que el retorno prematuro al juego, junto con la segunda lesión posterior antes de que el jugador se haya recuperado por completo de la primera, puede predisponer a un peor pronóstico.

Además, el Manuel MSD, indica que "los deportistas pueden negar o subestimar los síntomas resultantes de la conmoción cerebral para poder seguir jugando".

Ante la sospecha, el jugador debe abandonar el campo

En los deportes de contacto, ante una sospecha de una posible conmoción cerebral de un jugador, este debe ser retirado inmediatamente del campo y evaluado de forma estandarizada para valorar si es necesario trasladarle a un centro de emergencias o no, apunta el protocolo de la sociedad argentina.

Si finalmente su diagnóstico es tal, "no se le debe permitir que regrese al deporte el día de la lesión".

En este mismo artículo, la Sociedad Neurológica Argentina propone un Protocolo de Retorno Gradual al Juego tanto si la conmoción cerebral se produce en adultos como en juveniles e infantiles.